Entregué mis espaldas a quienes me azotaban, y mis mejillas a los que mesaban mi barba; no retiré mi rostro de los que me encarnecían y escupían.
Mateo 27:26 - Biblia Torres Amat 1825 Entonces les soltó a Barrabás; y a Jesús , después de haberlo hecho azotar, lo entregó en sus manos para que fuese crucificado. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces les soltó a Barrabás; y habiendo azotado a Jesús, le entregó para ser crucificado. Biblia Nueva Traducción Viviente Así fue que Pilato dejó a Barrabás en libertad. Mandó azotar a Jesús con un látigo que tenía puntas de plomo, y después lo entregó a los soldados romanos para que lo crucificaran. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Pilato les soltó a Barrabás. Mandó azotar a Jesús y lo entregó a los que debían crucificarlo. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces les soltó a Barrabás; y habiendo azotado a Jesús, lo entregó para que fuera crucificado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces les soltó a Barrabás y, después de mandar azotar a Jesús, se lo entregó para que lo crucificaran. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces les soltó a Barrabás; y habiendo azotado a Jesús, le entregó para ser crucificado. |
Entregué mis espaldas a quienes me azotaban, y mis mejillas a los que mesaban mi barba; no retiré mi rostro de los que me encarnecían y escupían.
siendo así que por causa de nuestras iniquidades fue él llagado, y despedazado por nuestras maldades; el castigo de que debía nacer nuestra paz con Dios, descargó sobre él, y con sus moretones fuimos nosotros curados.
y le entregarán a los gentiles para que sea escarnecido y azotado y crucificado; mas él resucitará al tercer día.
Y le escarnecerán, y le escupirán, y le azotarán, y le quitarán la vida, y al tercer día resucitará.
Al fin Pilatos, deseando contentar al pueblo, les soltó a Barrabás; y a Jesús , después de haberlo hecho azotar, se los entregó para que fuese crucificado.
Entonces se los entregó para que lo crucificasen. Se apoderaron, pues, de Jesús , y le sacaron fuera.
Porque andabais como ovejas descarriadas, mas ahora os habéis convertido y reunido al pastor, y obispo o superintendente de vuestras almas.