A lo que dijo Pedro: Aunque me sea forzoso morir contigo, yo no te negaré. Eso mismo protestaron todos los discípulos.
Mateo 26:51 - Biblia Torres Amat 1825 Y he aquí que uno de los que estaban con Jesús , tirando de la espada, hirió a un enviado del príncipe de los sacerdotes, cortándole una oreja. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero uno de los que estaban con Jesús, extendiendo la mano, sacó su espada, e hiriendo a un siervo del sumo sacerdote, le quitó la oreja. Biblia Nueva Traducción Viviente pero uno de los hombres que estaban con Jesús sacó su espada e hirió al esclavo del sumo sacerdote cortándole una oreja. Biblia Católica (Latinoamericana) Uno de los que estaban con Jesús sacó la espada e hirió al sirviente del sumo sacerdote, cortándole una oreja. La Biblia Textual 3a Edicion Pero he aquí, uno° de los que estaban con Jesús, extendió la mano y sacó su espada, e hiriendo al siervo del sumo sacerdote, le cortó la oreja. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Uno de los que estaban con Jesús echó mano a la espada, hirió al criado del sumo sacerdote y le amputó la oreja. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, uno de los que estaban con Jesús, extendiendo su mano, sacó su espada, e hiriendo a un siervo del sumo sacerdote, le cortó su oreja. |
A lo que dijo Pedro: Aunque me sea forzoso morir contigo, yo no te negaré. Eso mismo protestaron todos los discípulos.
Entretanto uno de los presentes (Pedro) desenvainando la espada, hirió a un criado del sumo sacerdote, y le cortó una oreja.
Pero Jesús vuelto a ellos los reprendió, diciendo: No sabéis a qué espíritu pertenecéis.
Respondió Jesús : Mi reino no es de este mundo. Si de este mundo fuera mi reino, claro está que mis gentes me habrían defendido para que no cayese en manos de los judíos; mas mi reino no es de acá.
Pues las armas con que combatimos no son carnales, sino que son poderosísimas en Dios para derrocar fortalezas, destruyendo nosotros con ellas los proyectos o raciocinios humanos,