Enmiéndate, ¡oh Jerusalén !, a fin de que no se aleje de ti mi alma: No sea que te reduzca a un desierto inhabitable.
Mateo 21:17 - Biblia Torres Amat 1825 Y dejándolos, salió fuera de la ciudad a Betania, y se quedó allí. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, a Betania, y posó allí. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego regresó a Betania, donde pasó la noche. Biblia Católica (Latinoamericana) En seguida Jesús los dejó y salió de la ciudad en dirección a Betania, donde pasó la noche. La Biblia Textual 3a Edicion Y dejándolos, salió fuera de la ciudad, a Betania, y pernoctó allí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y volviéndoles la espalda, salió fuera de la ciudad, a Betania, donde pasó la noche. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dejándolos, salió fuera de la ciudad a Betania; y posó allí. |
Enmiéndate, ¡oh Jerusalén !, a fin de que no se aleje de ti mi alma: No sea que te reduzca a un desierto inhabitable.
Y aun cuando llegaren a criar sus hijos, yo haré que queden sin ellos en este mundo. ¡Ay de ellos cuando yo llegue a abandonarlos enteramente!
¿Conque sabéis adivinar por el aspecto del cielo, y no podéis conocer las señales claras de estos tiempos de la venida del Mesías? Esta raza o generación mala y adúltera pide un prodigio; mas no se le dará ése que pide, sino el prodigio del profeta Jonás . Y dejándolos, se fue.
Cuando iban acercándose a Jerusalén , al llegar junto a Betania, al pie del monte de los Olivos, despachó dos de sus discípulos,
Así entró Jesús en Jerusalén y se fue al templo, donde después de haber observado por una y otra parte todas las cosas, siendo ya tarde, se salió a Betania con los doce.
Hallándose Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso, estando a la mesa, entró su mujer con un vaso de alabastro lleno de ungüento o perfume hecho de la espiga del nardo, de mucho precio, y quebrando el vaso, derramó el bálsamo sobre la cabeza de Jesús .
Y Jesús con sus discípulos se retiró a la ribera del mar de Tiberíades, y le fue siguiendo mucha gente de Galilea y de Judea,
Prosiguiendo Jesús su viaje a Jerusalén , entró en cierta aldea, donde una mujer, por nombre Marta, lo hospedó en su casa.
Y estando cerca de Betfage y de Betania, junto al monte llamado de los Olivos, despachó a dos de sus discípulos,
Después los sacó afuera camino de Betania; y levantando las manos les echó su bendi-ción.
Estaba enfermo por este tiempo un hombre llamado Lázaro, vecino de Betania, patria de María y de Marta sus hermanas.