Mateo 14:19 - Biblia Torres Amat 1825 Y habiendo mandado sentar a todos sobre la hierba, tomó los cinco panes y los dos peces , y levantando los ojos al cielo, los bendijo y partió; y dio los panes a los discípulos, y los discípulos los dieron a la gente. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces mandó a la gente recostarse sobre la hierba; y tomando los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los panes a los discípulos, y los discípulos a la multitud. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego le dijo a la gente que se sentara sobre la hierba. Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados, miró hacia el cielo y los bendijo. Después partió los panes en trozos y se los dio a sus discípulos, quienes los distribuyeron entre la gente. Biblia Católica (Latinoamericana) Y mandó a la gente que se sentara en el pasto. Tomó los cinco panes y los dos pescados, levantó los ojos al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y los entregó a los discípulos. Y los discípulos los daban a la gente. La Biblia Textual 3a Edicion Y habiendo ordenado a las multitudes que se recostaran en la hierba, tomó los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, pronunció la bendición, y partiendo los panes, los dio a los discípulos, y los discípulos a las multitudes. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y después de mandar a la gente que se sentara sobre la hierba, tomó los cinco panes y los dos peces, levantó los ojos al cielo, dijo la bendición, partió los panes y se los dio a sus discípulos, y los discípulos al pueblo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces mandó a la multitud recostarse sobre la hierba, y tomó los cinco panes y los dos peces, y levantando los ojos al cielo, bendijo, y partió y dio los panes a sus discípulos, y los discípulos a la multitud. |
Entonces les mandó que hiciesen sentar a todos sobre la hierba verde, divididos en cuadrillas.
Después, tomados los cinco panes y los dos peces , levantando los ojos al cielo los bendijo; y partió los panes y los dio a sus discípulos para que se los distribuyesen; igualmente repartió los dos peces entre todos;
Y alzando los ojos al cielo, arrojó un suspiro y la dijo: Effeta, que quiere decir Abríos.
Y tomando el cáliz dio gracias a Dios, y dijo: Tomad, y distribuidlo entre vosotros;
Después tomó el pan, dio gracias, lo partió, y se los dio, diciendo: Este es mi cuerpo, el cual se da por vosotros; haced esto en memoria mía.
Y estando juntos a la mesa, tomó el pan, y lo bendijo, y habiéndolo partido, se los dio.
Es de notar que eran como unos cinco mil hombres. Entonces dijo a sus discípulos: Hacedlos sentar por cuadrillas de cincuenta en cincuenta.
Y habiendo él tomado los cinco panes y los dos peces , levantando los ojos al cielo, los bendijo, los partió y los distribuyó a los discípulos, para que los sirviesen a la gente.
Quitaron, pues, la piedra; y Jesús levantando los ojos al cielo, dijo: ¡Oh Padre!, gracias te doy porque me has oído:
Arribaron a la sazón otras barcas de Tiberíades, cerca del lugar en que el Señor, después de haber dado gracias o echado su bendición, les dio de comer con los cinco panes.
Dicho esto, tomando pan, dio gracias a Dios en presencia de todos; y partiéndolo empezó a comer.
El que hace distinción de días, la hace para agradar al Señor. Y el que come de todo para agradar al Señor come, pues da gracias a Dios. Y el que se abstiene de ciertas viandas, por respeto al Señor lo hace; y así es que da gracias a Dios.
El cáliz de bendición que bendecimos, o consagramos, ¿no es la comunión de la sangre de Cristo ?; y el pan que partimos, ¿no es la participación del cuerpo del Señor?
Pero en fin, ora comáis, ora bebáis o hagáis cualquier otra cosa, hacedlo todo a gloria de Dios.
y dando gracias, lo partió, y dijo a sus discípulos: Tomad, y comed, éste es mi cuerpo, que por vosotros será entregado a la muerte; haced esto en memoria mía.
Todo cuanto hacéis, sea de palabra o de obra, hacedlo todo en nombre de nuestro Señor Jesucristo, y a gloria suya, dando por medio de él gracias a Dios Padre.
Entrando en la ciudad, luego lo hallaréis, pues no habrá subido todavía al lugar excelso a comer. Porque el pueblo no comerá hasta que él llegue, por cuanto él es quien bendice el sacrificio, y después se ponen a comer los convidados. Así, pues, subid presto, que ahora lo hallaréis.