En verdad os digo que hay aquí algunos que no han de morir antes que vean al Hijo del hombre aparecer en el esplendor de su reino.
Lucas 9:27 - Biblia Torres Amat 1825 Os aseguro con verdad, que algunos hay aquí presentes que no morirán sin que hayan visto el reino de Dios. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero os digo en verdad, que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte hasta que vean el reino de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Les digo la verdad, algunos de los que están aquí ahora no morirán sin antes ver el reino de Dios». Biblia Católica (Latinoamericana) En verdad les digo que algunos de los aquí presentes no morirán sin antes haber visto el Reino de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion En verdad os digo: Hay algunos de los que están° aquí, que no gustarán la muerte hasta que vean el reino de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Os lo digo de verdad: hay algunos de los aquí presentes que no experimentarán la muerte hasta que vean el reino de Dios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y os digo en verdad, que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que vean el reino de Dios. |
En verdad os digo que hay aquí algunos que no han de morir antes que vean al Hijo del hombre aparecer en el esplendor de su reino.
En verdad os digo, que de hoy más no beberá de este fruto de la vid, hasta el día en que lo beba nuevo en el reino de Dios.
Y les añadió: En verdad os digo, que algunos de los que aquí están no han de morir sin que vean la llegada del reino de Dios en su majestad.
El mismo Espíritu Santo le había revelado, que no había de morir antes de ver al Cristo o Ungido del Señor.
porque os aseguro que ya no beberé el zumo de la vid, hasta que llegue el reino de Dios.
En la casa de mi Padre hay muchas habitaciones; que si no fuese así, os lo hubiera yo dicho. Yo voy a preparar lugar para vosotros.
Mas yo os digo la verdad, os conviene que yo me vaya; porque si yo no me voy, el Consolador o abogado no vendrá a vosotros; pero si me voy, os lo enviaré.
Al oír esto, cogieron piedras para tirárselas. Mas Jesús se escondió, y salió del templo.
Por cuanto era cosa digna que aquel Dios para quien y por quien son todas las cosas, habiendo de conducir a muchos hijos adoptivos a la gloria, consumase o inmolase por medio de la pasión y muerte al autor y modelo de la salvación de los mismos, Jesucristo Señor nuestro.