Baste al discípulo el ser tratado como su maestro, y al criado como su amo. Si al padre de familia le han llamado Beelzebub, ¿cuánto más a sus domésticos?
Lucas 7:33 - Biblia Torres Amat 1825 Vino Juan Bautista, que ni comía pan, ni bebía vino, y habéis dicho: Está endemoniado. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque vino Juan el Bautista, que ni comía pan ni bebía vino, y decís: Demonio tiene. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues Juan el Bautista no pasaba el tiempo comiendo pan y bebiendo vino, y ustedes dicen: “Está poseído por un demonio”. Biblia Católica (Latinoamericana) Porque vino Juan el Bautista, que no comía pan ni bebía vino, y dijeron: La Biblia Textual 3a Edicion Porque vino Juan el Bautista, que no come° pan ni bebe° vino, y decís: ¡Demonio tiene! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque ha llegado Juan el Bautista, que ni come pan ni bebe vino, y decís: '¡Está endemoniado!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque vino Juan el Bautista, que ni comía pan, ni bebía vino, y decís: Demonio tiene. |
Baste al discípulo el ser tratado como su maestro, y al criado como su amo. Si al padre de familia le han llamado Beelzebub, ¿cuánto más a sus domésticos?
En aquella temporada se dejó ver Juan Bautista predicando en el desierto de Judea,
Traía Juan un vestido de pelos de camello y un cinto de cuero a sus lomos, y su comida eran langostas y miel silvestre.
Andaba Juan vestido con un saco de pelos de camello, y traía un ceñidor de cuero a la cintura, sustentándose de langostas y miel silvestre. Y predicaba diciendo:
porque será grande en la presencia del Señor. No beberá vino ni cosa que pueda embriagar, y será lleno del Espíritu Santo ya desde el seno de su madre,
Se parecen a los muchachos sentados en la plaza y que por vía de juego hablan con los de enfrente, y les dicen: Os cantamos al son de la flauta, y no habéis danzado; entonamos lamentaciones, y no habéis llorado.
Ha venido el Hijo del hombre, que come y bebe y decís: He aquí un hombre voraz y bebedor, amigo de publicanos y de gentes de mala vida.
Decían muchos de ellos: Está poseído del demonio, y ha perdido el juicio; ¿por qué le escucháis?
A esto respondieron los judíos diciéndole: ¿No decimos bien nosotros que tú eres un samaritano, y que estás endemoniado?
Dijeron los judíos: Ahora acabamos de conocer que estás poseído de algún demonio. Abrahán murió, y murieron también los profetas, y tú dices: Quien observare mi palabra, no morirá eternamente.
Pero hubo algunos que se mofaban de ellos diciendo: Estos sin duda están borrachos, o llenos de mosto.