Pero ¿qué es lo que yo he de hacer con vosotros, oh tirios, y sidonios, y filisteos de todos los confines? ¿Por ventura queréis vengaros de mí? Y si os vengáis de mí, luego muy en breve yo haré recaer la paga o castigo sobre vuestras cabezas.
Lucas 10:14 - Biblia Torres Amat 1825 Por eso Tiro y Sidón serán juzgadas con más clemencia que vosotras. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, en el juicio será más tolerable el castigo para Tiro y Sidón, que para vosotras. Biblia Nueva Traducción Viviente Así es, el día del juicio, les irá mejor a Tiro y Sidón que a ustedes. Biblia Católica (Latinoamericana) Con toda seguridad Tiro y Sidón serán tratadas con menos rigor que ustedes en el día del juicio. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, en el juicio será más tolerable para Tiro y Sidón que para vosotras. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso, en el juicio habrá menos rigor para Tiro y Sidón que para vosotras. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, en el juicio será más tolerable el castigo para Tiro y Sidón que para vosotras. |
Pero ¿qué es lo que yo he de hacer con vosotros, oh tirios, y sidonios, y filisteos de todos los confines? ¿Por ventura queréis vengaros de mí? Y si os vengáis de mí, luego muy en breve yo haré recaer la paga o castigo sobre vuestras cabezas.
Esto dice el Señor: Después de tres, cuatro y más maldades de Tiro, ya no la convertiré, pues ha encerrado en cautiverio, en la Idumea, a toda la gente de mi pueblo, sin haberse acordado de la antigua fraternal alianza.
De entre todos los linajes de la tierra, sois vosotros los únicos a quienes he reconocido, por lo mismo os he de castigar más por todas vuestras maldades.
En verdad os digo que Sodoma y Gomorra serán tratadas con menos rigor en el día del juicio, que esa ciudad.
¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida! Que si en Tiro y en Sidón se hubiesen hecho los milagros que se han obrado en vosotras, hace tiempo que habrían hecho penitencia, cubiertas de ceniza y de cilicio.
Este juicio de condenación consiste en que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, por cuanto sus obras eran malas.
Por donde tú eres inexcusable, ¡oh hombre, quienquiera que seas!, que te metes a condenar a los demás. Pues en lo que condenas a otro te condenas a ti mismo, haciendo como haces tú, ¡oh judío!, aquellas mismas cosas que condenas.
Y el que por naturaleza es incircunciso o gentil, y guarda exactamente la ley, ¿no te condenará a ti, que teniendo la letra de la ley y la circuncisión, eres prevaricador de la ley?