Y yo haré que tu lengua se pegue a tu paladar, de suerte que estés mudo y no seas ya un hombre que reprende, porque ella es una familia contumaz.
Lucas 1:22 - Biblia Torres Amat 1825 Salido, en fin, no podía hablarles palabra, de donde conocieron que había tenido en el templo alguna visión. El procuraba explicarse por señas, y permaneció mudo y sordo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero cuando salió, no les podía hablar; y comprendieron que había visto visión en el santuario. Él les hablaba por señas, y permaneció mudo. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando por fin salió, no podía hablarles. Entonces, por las señas que hacía y su silencio, se dieron cuenta de que seguramente había tenido una visión en el santuario. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando finalmente salió, no podía hablarles, y comprendieron que había tenido alguna visión en el Santuario. Intentaba comunicarse por señas, pues permanecía mudo. La Biblia Textual 3a Edicion Y cuando salió, no podía hablarles; y comprendieron que había visto° una visión en el santuario, porque les hacía señas, pero permanecía mudo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando, por fin, salió, no podía hablarles; y entonces comprendieron que había tenido en el santuario alguna visión. Él intentaba explicarse por señas, pues seguía mudo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando salió, no les podía hablar; y entendieron que había visto visión en el templo, pues les hablaba por señas, y permanecía mudo. |
Y yo haré que tu lengua se pegue a tu paladar, de suerte que estés mudo y no seas ya un hombre que reprende, porque ella es una familia contumaz.
Entretanto estaba el pueblo esperando a Zacarías, y maravillándose de que se detuviese tanto en el templo.
Al mismo tiempo preguntaban por señas al padre del niño cómo quería que se le llamase.
A este discípulo, pues, Simón Pedro le hizo una seña, diciéndole: ¿Quién es ése de quien habla?
Mas Pedro haciéndoles señas con la mano para que callasen, les contó cómo el Señor le había sacado de la cárcel, y añadió: Haced saber esto a Santiago y a los hermanos. Y partiendo de allí, se retiró a otra parte.
Entre tanto un tal Alejandro, habiendo podido salir de entre el tropel, ayudado de los judíos, pidiendo con la mano que tuviesen silencio, quería informar al pueblo.
Y concediéndoselo el tribuno, Pablo poniéndose en pie sobre las gradas, hizo señal con la mano al pueblo, y siguiéndole a esto gran silencio, le habló así en lengua hebrea: