Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Levítico 1:14 - Biblia Torres Amat 1825

Pero si la ofrenda del holocausto hecha al Señor fuere de aves, será de tórtolas o de pichones,

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Si la ofrenda para Jehová fuere holocausto de aves, presentará su ofrenda de tórtolas, o de palominos.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

»Si ofreces un ave como ofrenda quemada al Señor, elegirás una tórtola o un pichón de paloma.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Si se ofrece a Yavé un holocausto de aves, presentarán tórtolas o pichones.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Y si su ofrenda a YHVH consiste en un holocausto de ave, presentará como ofrenda suya unas tórtolas o pichones.°

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Si la ofrenda a Yahveh es un holocausto de aves, ofrecerá tórtolas o pichones.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y si el holocausto se hubiere de ofrecer a Jehová de aves, presentará su ofrenda de tórtolas, o de palominos.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Levítico 1:14
10 Referans Kwoze  

A lo que respondió el Señor, diciendo: Escógeme una vaca, una cabra y un carnero, todos de tres años, con una tórtola y una paloma.


Pero si sus facultades no alcanzan para poder ofrecer un cordero, tomará dos tórtolas o dos pichones, el uno para holocausto y el otro para sacrificio por el pecado; y el sacerdote hará oración por ella, y así será purificada.


Y quemará el otro en holocausto, como se acostumbra hacer; y el sacerdote orará por este hombre y por su pecado, y se le perdonará.


Mas si no tuviere posibilidad para ofrecer dos tórtolas o dos pichones, ofrecerá por su pecado la décima parte de un efi de flor de harina, en que no ha de mezclar aceite, ni poner encima incienso alguno, pues es ofrenda por el pecado.


Pero si no pudiere ofrecer una res, ofrezca al Señor dos tórtolas o dos pichones, uno por el pecado y otro en holocausto,


Tomad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis el reposo para vuestras almas.


Habiendo entrado Jesús en el templo de Dios, echó fuera de él a todos los que vendían allí y compraban, y derribó las mesas de los banqueros o cambiantes, y las sillas de los que vendían las palomas para los sacrificios.


y para presentar la ofrenda de un par de tórtolas, o dos palominos, como está ordenado en la ley del Señor.


Porque cuando un hombre tiene gran voluntad de dar, Dios la acepta, no exigiendo de él sino lo que puede, y no lo que no puede.


el cual no tiene necesidad, como los demás sacerdotes, de ofrecer cada día sacrificios, primeramente por sus pecados, y después por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez sola, ofreciéndose a sí mismo.