Muchas veces los libró Dios. Ellos lo exasperaban con sus designios; y fueron abatidos por causa de sus iniquidades.
Jueces 16:14 - Biblia Torres Amat 1825 Lo cual después que ejecutó Dalila, le gritó: ¡Sansón, los filisteos se echan sobre ti! Mas él despertando del sueño, arrancó el clavo junto con las trenzas de cabellos y los lizos de la tela. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y ella las aseguró con la estaca, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Mas despertando él de su sueño, arrancó la estaca del telar con la tela. Biblia Nueva Traducción Viviente Después lo aseguró con la lanzadera del telar. Una vez más gritó: «¡Sansón! ¡Los filisteos han venido a capturarte!»; pero Sansón se despertó, arrancó la lanzadera del telar y sacó de un tirón su cabello del telar y de la tela. Biblia Católica (Latinoamericana) Ella lo durmió, entretejió las siete trenzas de su cabellera con la urdimbre de un telar, las apretó con un peine de tejedor y le dijo: '¡Sansón, los filisteos te atacan!' Se despertó de su sueño y arrancó el peine, la lanzadera y la urdimbre. La Biblia Textual 3a Edicion Ella pues las aseguró con la estaca, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos te acometen! Y él, despertando de su sueño, arrancó la estaca del telar juntamente con los lizos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y las fijaras con una clavija de tejedor, yo me quedaría sin fuerzas y sería como un hombre cualquiera'. Entonces ella consiguió que se durmiera; le tejió las siete trenzas de la cabellera con un hilo fuerte y las fijó con una clavija de tejedor. Luego le gritó: '¡Sobre ti los filisteos, Sansón!'. Él se despertó al punto de su sueño y arrancó el tejido, la clavija y el telar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ella hincó la estaca, y le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Mas despertando él de su sueño, arrancó la estaca del telar con la tela. |
Muchas veces los libró Dios. Ellos lo exasperaban con sus designios; y fueron abatidos por causa de sus iniquidades.
Le dijo Dalila otra vez: ¿Hasta cuándo me has de engañar y mentir? Declárame ya con qué has de ser atado. Le respondió Sansón: Si entretejes mis siete trenzas de cabellos con los lizos de la tela, y revueltas a un clavo, hincas éste en tierra, quedaré sin fuerzas.
Le dijo entonces Dalila: ¿Cómo puedes decir que me amas, cuando tu corazón no está unido conmigo? Por tres veces me has mentido, no queriendo decirme en qué consiste tu grandísima fuerza.