No permita Dios que tenga yo parte en sus designios, ni empañe mi gloria uniéndome con ellos; porque en los homicidios demostraron su furor, y en la destrucción de una ciudad su venganza.
Juan 18:18 - Biblia Torres Amat 1825 Los criados y ministros, que habían ido a prender a Jesús , estaban a la lumbre, porque hacía frío, y se calentaban. Pedro asimismo estaba con ellos, calentándose. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y estaban en pie los siervos y los alguaciles que habían encendido un fuego; porque hacía frío, y se calentaban; y también con ellos estaba Pedro en pie, calentándose. Biblia Nueva Traducción Viviente Como hacía frío, los sirvientes de la casa y los guardias habían hecho una fogata con carbón. Estaban allí de pie, junto al fuego, calentándose, y Pedro estaba con ellos, también calentándose. Biblia Católica (Latinoamericana) Los sirvientes y los guardias tenían unas brasas encendidas y se calentaban, pues hacía frío. También Pedro estaba con ellos y se calentaba. La Biblia Textual 3a Edicion Y los siervos y los alguaciles, que habían preparado un brasero, estaban° de pie y se calentaban, pues hacía frío. Y Pedro también estaba con ellos, de pie y calentándose. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Estaban allí los criados y los guardias, que habían hecho unas brasas para calentarse, pues hacía frío. También Pedro estaba con ellos, de pie, calentándose. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los siervos y los alguaciles que habían encendido unas brasas, porque hacía frío, estaban de pie y se calentaban; y Pedro también estaba con ellos de pie, calentándose. |
No permita Dios que tenga yo parte en sus designios, ni empañe mi gloria uniéndome con ellos; porque en los homicidios demostraron su furor, y en la destrucción de una ciudad su venganza.
Llegado allá hizo asiento en una cueva, y dirigiéndole el Señor la palabra, le dijo: ¿Qué haces ahí, Elías?
Dichoso aquel varón que no se deja llevar de los consejos de los malos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se asienta en la cátedra pestilente de los libertinos;
Quien anda con sabios, sabio será; el amigo de los necios se asemejará a ellos.
Pedro como quiera le fue siguiendo a lo lejos, hasta dentro del palacio del sumo sacerdote, donde se sentó al fuego con los criados, y estaba calentándose.
y viendo a Pedro que se estaba calentando, clavados en él los ojos, le dijo: Tú también andabas con Jesús Nazareno.
Y le vino un sudor como de gotas de sangre, que chorreaba hasta el suelo.
Y estaba allí en pie Simón Pedro, calentándose. Le dijeron, pues: ¿No eres tú también de sus discípulos? El lo negó diciendo: No lo soy.
Judas, pues, habiendo tomado una compañía de soldados y varios ministros que le dieron los sacerdotes y fariseos, fue allá con linternas, y hachas, y con armas.
Al saltar en tierra, vieron preparadas brasas encendidas, y un pez puesto encima, y pan.
Puestos ya en libertad, volvieron a los suyos; y les contaron cuantas cosas les habían dicho los príncipes de los sacerdotes, y los ancianos.
No deis lugar a la seducción, las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.