y estará lleno del espíritu del temor del Señor. El no juzgará por lo que aparece exteriormente a la vista, ni condenará sólo por lo que se oye decir;
Juan 16:13 - Biblia Torres Amat 1825 Cuando venga el Espíritu de verdad, él os enseñará todas las verdades necesarias para la salvación; pues no hablará de suyo, sino que dirá todas las cosas que habrá oído, y os anunciará las venideras. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando venga el Espíritu de verdad, él los guiará a toda la verdad. Él no hablará por su propia cuenta, sino que les dirá lo que ha oído y les contará lo que sucederá en el futuro. Biblia Católica (Latinoamericana) Y cuando venga él, el Espíritu de la Verdad, los guiará en todos los caminos de la verdad.
El no viene con un mensaje propio, sino que les dirá lo que escuchó y les anunciará lo que ha de venir. La Biblia Textual 3a Edicion Pero cuando venga Aquél, el Espíritu de la Verdad, os guiará en° toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará cuanto oirá, y os anunciará las cosas que han de venir. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando venga él, el Espíritu de la verdad, os guiará hasta la verdad plena; porque no hablará por cuenta propia, sino que dirá todo lo que él oye y os explicará lo que está por venir. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero cuando el Espíritu de verdad venga, Él os guiará a toda verdad; porque no hablará de sí mismo, sino que hablará todo lo que oiga, y os hará saber las cosas que han de venir. |
y estará lleno del espíritu del temor del Señor. El no juzgará por lo que aparece exteriormente a la vista, ni condenará sólo por lo que se oye decir;
Y después de esto sucederá que derramaré yo mi espíritu divino sobre toda clase de hombres; y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos tendrán sueños misteriosos, y tendrán visiones vuestros jóvenes.
puesto que yo no he hablado de mí mismo, sino que el Padre que me envió, él mismo me ordenó lo que debo decir, y cómo he de hablar.
a saber, el Espíritu de verdad, a quien el mundo, o el hombre mundano, no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conoceréis, porque morará con vosotros, y estará dentro de vosotros.
Mas el Consolador, el Espíritu Santo, que mi Padre enviará en mi nombre, os lo enseñará todo, y os recordará cuantas cosas os tengo dichas.
Le respondió Jesús : Yo soy el camino, la verdad, y la vida: Nadie viene al Padre sino por mí.
Mas cuando viniere el Consolador, el Espíritu de verdad que procede del Padre, y que yo os enviaré de parte de mi Padre, él dará testimonio de mí.
Aún tengo otras muchas cosas que deciros; mas por ahora no podéis comprenderlas.
y atestigua cosas que ha visto, y oído; y con todo casi nadie presta fe a su testimonio.
Yo hablo lo que he visto en mi Padre; vosotros hacéis lo que habéis visto en vuestro padre.
uno de los cuales por nombre Agabo, inspirado de Dios, anunciaba que había de haber una gran hambre por toda la tierra, como en efecto la hubo en tiempo del emperador Claudio;
solamente puedo deciros que el Espíritu Santo en todas las ciudades me asegura y avisa que en Jerusalén me aguardan cadenas y tribulaciones.
diciéndome: No temas, Pablo, tú sin falta has de comparecer ante César; y he ahí que Dios te ha concedido la vida de todos los que navegan contigo.
Mas nosotros debemos siempre dar gracias a Dios por vosotros, ¡oh hermanos amados de Dios!, por haberos Dios escogido por primicias de salvación en toda la Macedonia, mediante la santificación del espíritu y la verdadera fe que os ha dado,
el cual se opondrá a Dios, y se alzará contra todo lo que se dice Dios, o se adora, hasta llegar a poner su asiento en el templo de Dios, dando a entender que es Dios.
nos ha hablado últimamente en estos días, por medio de su Hijo Jesucristo, a quien constituyó heredero universal de todas las cosas, por quien creó también los siglos y cuanto ha existido en ellos.
No os he escrito como a ignorantes de la verdad, sino como a los que la conocen y la saben; porque ninguna mentira procede de la verdad, que es Jesucristo.
En fin, hijitos míos, permaneced en él; para que cuando venga, estemos confiados, y que al contrario no nos hallemos confundidos por él en su venida.
Carísimos, amémonos los unos a los otros, porque la caridad procede de Dios. Y todo aquel que así ama, es hijo de Dios, y conoce a Dios.
Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: El Padre, el Verbo y el Espíritu Santo; y éstos tres son una misma cosa.
Revelación de Jesucristo, la cual como hombre ha recibido de Dios, su Padre, para descubrir a sus siervos cosas que deben suceder presto, y la ha manifestado a su Iglesia por medio de su ángel enviado a Juan, siervo suyo,
En cuanto al misterio de las siete estrellas que viste en mi mano derecha, y los siete candeleros de oro, las siete estrellas son los siete ángeles de las siete iglesias, y los siete candeleros son las siete iglesias.