A lo que Jesús respondiendo dijo: Yo no soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.
Juan 1:11 - Biblia Torres Amat 1825 Vino a su propia casa, y los suyos no le recibieron. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. Biblia Nueva Traducción Viviente Vino a los de su propio pueblo, y hasta ellos lo rechazaron; Biblia Católica (Latinoamericana) Vino a su propia casa,
y los suyos no lo recibieron;' La Biblia Textual 3a Edicion A lo suyo° vino, y los suyos no lo recibieron, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ella vino a los suyos, y los suyos no la recibieron. Biblia Reina Valera Gómez (2023) A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. |
A lo que Jesús respondiendo dijo: Yo no soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel.
Es de saber que sus naturales le aborrecían; y así despacharon tras de él embajadores, diciendo: No queremos a ése por nuestro rey.
En el mundo estaba, y el mundo fue por él hecho, y con todo el mundo no le conoció.
Pero a todos los que le recibieron, que son los que creen en su nombre, les dio poder de llegar a ser hijos de Dios.
Después dice al discípulo: Ahí tienes a tu madre. Y desde aquel punto se encargó de ella el discípulo, y la tuvo consigo en su casa.
y atestigua cosas que ha visto, y oído; y con todo casi nadie presta fe a su testimonio.
Ahora, pues, hermanos míos, hijos de Abrahán, a vosotros es, y a cualquiera que entre vosotros teme a Dios, a quienes es enviado este anuncio de la salvación.
Entonces Pablo y Bernabé con gran entereza les dijeron: A vosotros debía ser primeramente anunciada la palabra de Dios; mas ya que la rechazáis, y os juzgáis vosotros mismos indignos de la vida eterna, de hoy en adelante nos vamos a predicar a los gentiles:
Despidiéndonos unos de otros, entramos en la nave; y ellos se volvieron a sus casas.
Digo, pues, que Jesucristo fue ministro, o predicador de la buena nueva, para con los de la circuncisión, a fin de que fuese reconocida la veracidad de Dios, en el cumplimiento de las promesas que él había hecho a los padres.
Cristo es mi testigo de que os digo la verdad; y mi conciencia da testimonio, en presencia del Espíritu Santo, de que no miento,
cuyos padres son los patriarcas, y de quienes desciende el mismo Cristo según la carne, el cual es Dios, bendito sobre todas las cosas por siempre jamás. Amén.
Mas cumplido que fue el tiempo, envió Dios a su Hijo, formado de una mujer, y sujeto a la ley,