y apostó toda la gente armada de dagas, desde la parte derecha del templo hasta la izquierda delante del altar y del templo, alrededor del rey.
Joel 2:8 - Biblia Torres Amat 1825 No se embarazarán los unos a los otros, cada uno tirará línea recta por su senda, y aun cayendo, o saltando desde las ventanas, no se harán daño. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Ninguno estrechará a su compañero, cada uno irá por su carrera; y aun cayendo sobre la espada no se herirán. Biblia Nueva Traducción Viviente No se empujan unos a otros; cada uno se mueve en la posición exacta. Atraviesan las líneas de defensa sin perder la formación. Biblia Católica (Latinoamericana) Nadie tropieza con su vecino, cada cual va por su camino. Atacan en medio de las flechas, sin romper las filas. La Biblia Textual 3a Edicion No se estorban unos a otros, Cada cual marcha por su camino, Irrumpen a través de toda arma,° y no se desbandan.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ninguno estorba a su vecino, cada cual avanza por su senda. Irrumpen por el vallado sin romper las filas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ninguno oprimirá a su compañero, cada uno irá por su sendero; y aun cayendo sobre la espada no se herirán. |
y apostó toda la gente armada de dagas, desde la parte derecha del templo hasta la izquierda delante del altar y del templo, alrededor del rey.
Al mismo tiempo reparó con gran diligencia todas las partes del muro que estaban ya arruinadas, y construyó torres encima y otro muro exterior; y restauró la fortaleza de Mello en la ciudad de David o monte Sión, e hizo provisión de todo género de armas y escudos.
Los que trabajaban en el muro, los que llevaban cargas, y los que las cargaban, trabajaban con una mano, y en otra tenían la espada;
Yo, pues, ni mis hermanos, ni mis criados, ni las guardias que me seguían, nos desnudábamos; ninguno se quitaba los vestidos sino para alguna purificación o lavatorio.
mas si no escuchasen, serán pasados a cuchillo, y perecerán en su necedad.
las langostas, que sin tener rey, se mueven todas ordenadas en escuadrones;
Tú, la fuente de los huertos, el pozo de aguas vivas, que bajan con ímpetu del monte Líbano.
Sus saetas están aguzadas, y todos sus arcos tensos. Las pezuñas de sus caballos son como pedernal, y las ruedas de sus carros como una tempestad impetuosa.
Correrán como campeones; como fuertes guerreros, así escalarán el muro; nadie se saldrá de sus filas, ni se desviará de su camino.
Asaltarán una ciudad, correrán por las murallas, subirán por las casas, entrarán por las ventanas como ladrones.