Entonces fue cuando erigió Salomón un templo a Samos, ídolo de Moab, sobre el monte que está enfrente de Jerusalén , y a Moloc, ídolo de los hijos de Amón.
Jeremías 48:46 - Biblia Torres Amat 1825 ¡Ay de ti, oh Moab!; has perecido, ¡oh pueblo del dios Camos!, porque al cautiverio han sido llevados tus hijos y tus hijas. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 ¡Ay de ti, Moab! pereció el pueblo de Quemos; porque tus hijos fueron puestos presos para cautividad, y tus hijas para cautiverio. Biblia Nueva Traducción Viviente »¡Qué aflicción te espera, oh pueblo de Moab! ¡El pueblo del dios Quemos queda destruido! Tus hijos y tus hijas fueron llevados cautivos. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Ay de ti, Moab!
¡Estás perdido, pueblo de Camos!
Pues tus hijos han sido llevados al destierro
y tus hijas al cautiverio. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Ay de ti, Moab! ¡Pereció el pueblo de Quemos! Tus hijos marchan en cautiverio, Y tus hijas parten para el destierro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Ay de ti, Moab! ¡Estás perdido, pueblo de Camós! Tus hijos son llevados cautivos, tus hijas van al destierro. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¡Ay de ti, Moab! pereció el pueblo de Quemos: porque tus hijos serán llevados cautivos, y tus hijas cautivas. |
Entonces fue cuando erigió Salomón un templo a Samos, ídolo de Moab, sobre el monte que está enfrente de Jerusalén , y a Moloc, ídolo de los hijos de Amón.
Además profanó el rey los lugares altos junto a Jerusalén , que estaban a la derecha del monte Olivete, llamado del Escándalo, erigidos por Salomón , rey de Israel, al ídolo de los sidonios Astarot, y a Camos, escándalo de Moab, y a Melcom, oprobio de los hijos de Amón;
Aconséjate, consulta el caso, haz sombra a los que huyen; de modo que se oculten en medio del día como en una oscura noche; esconde a los fugitivos y no entregues alevosamente a los israelitas que andan errantes.
Y Moab se verá avergonzada por causa de Camos; al modo que fue afrentada la casa de Israel por causa de los ídolos de Betel, en que tenía puesta su confianza.
Porque por haber puesto tú, ¡oh Moab!, la confianza en tus fortalezas y en tus tesoros, por lo mismo serás tú también presa, e irán cautivos a otro país el dios Camos y sus sacerdotes y príncipes.
¡Ay de ti, Moab! ¡Pereciste, oh pueblo de Camos! Camos, vuestro Dios ha entregado sus hijos a la fuga, y sus hijas al cautiverio de Sehón, rey de los amorreos.
Pues qué, ¿no crees tú que se te deben a ti de derecho los países que posee tu dios o ídolo Camos? Es, pues, muy justo que ceda en posesión nuestra lo que Dios nuestro Señor se ha adquirido con la victoria;