Vosotros, por el contrario, no habéis de querer ser saludados maestros, porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.
Filemón 1:16 - Biblia Torres Amat 1825 Ahora bien, si me tienes por íntimo compañero tuyo, acógele como a mí mismo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 no ya como esclavo, sino como más que esclavo, como hermano amado, mayormente para mí, pero cuánto más para ti, tanto en la carne como en el Señor. Biblia Nueva Traducción Viviente Él ya no es como un esclavo para ti. Es más que un esclavo, es un hermano amado, especialmente para mí. Ahora será de más valor para ti, como persona y como hermano en el Señor. Biblia Católica (Latinoamericana) Ya no será esclavo, sino algo mucho mejor, pues ha pasado a ser para mí un hermano muy querido, y lo será mucho más todavía para ti. La Biblia Textual 3a Edicion no ya como siervo, sino más que siervo: como hermano amado, especialmente para mí, y cuánto más para ti, así en la carne como en el Señor. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y no ya como esclavo, sino mucho más que esclavo: como hermano muy querido, especialmente para mí, y cuánto más para ti, tanto en el aspecto humano como en el Señor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) no ya como siervo, sino como más que siervo, como hermano amado, mayormente para mí, pero cuánto más para ti, tanto en la carne como en el Señor. |
Vosotros, por el contrario, no habéis de querer ser saludados maestros, porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.
Marchó, pues, Ananías, y entró en la casa, e imponiéndole las manos, le dijo: ¡Saulo, hermano mío!, el Señor Jesús , que se te apareció en el camino que traías, me ha enviado para que recobres la vista, y quedes lleno del Espíritu Santo.
Pues aquel que siendo esclavo es llamado al servicio del Señor, se hace liberto del Señor; y de la misma manera aquel que es llamado siendo libre, se hace esclavo de Cristo .
Siervos, obedeced en todo a vuestros amos temporales, no sirviéndolos sólo mientras tienen la vista sobre vosotros, o solamente cuando os miran, como si no deseaseis más que complacer a los hombres, sino con sencillez de corazón y temor de Dios.
Si alguno enseña de otra manera, y no abraza las saludables palabras o instrucciones de nuestro Señor Jesucristo, y la doctrina que es conforme a la piedad o religión,
el cual es fiel al que le ha constituido tal, como lo fue también Moisés con respecto a toda su casa.
En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios, si amamos a Dios, y guardamos sus mandamientos.