En seguida dijo el Señor a Moisés: Extiende tu mano sobre la tierra de Egipto, hacia la langosta, a fin de que venga y devore toda la hierba que hubiere quedado después del pedrisco.
Éxodo 10:5 - Biblia Torres Amat 1825 que cubran la superficie de la tierra, de suerte que nada de ella se vea, y devoren cuanto no hubiere destrozado el pedrisco; porque roerán todos los árboles y plantas que brotan en los campos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 la cual cubrirá la faz de la tierra, de modo que no pueda verse la tierra; y ella comerá lo que escapó, lo que os quedó del granizo; comerá asimismo todo árbol que os fructifica en el campo. Biblia Nueva Traducción Viviente Cubrirán la tierra de tal manera que no podrás ver el suelo. Devorarán lo poquito que quedó después de la granizada, junto con todos los árboles que crecen en el campo. Biblia Católica (Latinoamericana) Cubrirán toda la superficie del país, de suerte que ya no se vea la tierra, y devorarán todo lo que a ustedes les queda, todo lo que no destrozó el granizo; y además roerán todos los árboles que tienen en el campo. La Biblia Textual 3a Edicion Cubrirá la superficie de la tierra, de modo que nadie pueda ver la tierra, y se comerá lo sobrante, lo que os ha quedado del granizo y se comerá todo árbol que os brota en el campo, Biblia Serafín de Ausejo 1975 que cubrirá la superficie de la tierra, de suerte que no podrá verse el suelo, y devorará el resto de lo que se había salvado, lo que os dejó la granizada, y también devorará todo árbol que crece en el campo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) la cual cubrirá la faz de la tierra, de modo que no pueda verse la tierra; y ella comerá lo que quedó salvo, lo que os ha quedado del granizo; comerá asimismo todo árbol que os produce fruto en el campo: |
En seguida dijo el Señor a Moisés: Extiende tu mano sobre la tierra de Egipto, hacia la langosta, a fin de que venga y devore toda la hierba que hubiere quedado después del pedrisco.
Y cubrieron toda la faz de la tierra, talándolo todo. De manera que fue devorada la hierba del campo, y todos los frutos de los árboles, que había perdonado la piedra; y no quedó absolutamente cosa verde, ni en los árboles, ni en las hierbas de la tierra en todo Egipto.
Que si prosigues resistiendo y no quieres soltarle, mira que mañana yo inundaré tus comarcas de langostas,
Lo que dejó la oruga se lo comió la langosta, y lo que dejó la langosta se lo comió el pulgón, y lo que dejó el pulgón lo consumió la langosta.
Y compensaré los años estériles que ocasionó la langosta, el pulgón, la roya, y la oruga, terribles ejércitos que envié contra vosotros.
Delante de él va un fuego devorador, y lleva en pos de sí una abrasadora llama; la tierra que antes de su llegada era un paraíso de delicias, la deja hecha un asolado desierto, sin que nadie pueda librarse de él.