Y os declaro que no beberé ya más desde ahora de este fruto de la vid, hasta el día en que beba con vosotros el nuevo cáliz de delicias en el reino de mi Padre.
Efesios 2:6 - Biblia Torres Amat 1825 y nos resucitó con él, y nos hizo sentar sobre los cielos en la persona de Jesucristo, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, Biblia Nueva Traducción Viviente Pues nos levantó de los muertos junto con Cristo y nos sentó con él en los lugares celestiales, porque estamos unidos a Cristo Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Nos resucitó en Cristo Jesús y con él, para sentarnos con él en el mundo de arriba. La Biblia Textual 3a Edicion y juntamente con Jesús el Mesías nos resucitó y nos hizo sentar en los cielos,° Biblia Serafín de Ausejo 1975 con él nos resucitó y con él nos sentó en el cielo por Cristo Jesús, Biblia Reina Valera Gómez (2023) y juntamente con Él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar con Él, en lugares celestiales en Cristo Jesús; |
Y os declaro que no beberé ya más desde ahora de este fruto de la vid, hasta el día en que beba con vosotros el nuevo cáliz de delicias en el reino de mi Padre.
Dichosos aquellos siervos a los cuales el amo al venir encuentra así velando; en verdad os digo, que recogiéndose él su vestido, los hará sentar a la mesa, y se pondrá a servirles.
El que me sirve, sígame; que donde yo estoy, allí estará también el que me sirve; y a quien me sirviere, le honrará mi Padre.
Y cuando haya ido, y os haya preparado lugar, vendré otra vez, y os llevaré conmigo, para que donde yo estoy, estéis también vosotros.
Pablo, por voluntad de Dios apóstol de Jesucristo, a todos los santos, residentes en Efeso, y fieles en Cristo Jesús ;
Bendito el Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo, que nos ha colmado en Cristo de toda suerte de bendiciones espirituales del cielo,
Por cuanto somos hechura suya en la gracia como lo fuimos en la naturaleza, creados en Jesucristo para obras buenas, preparadas por Dios desde la eternidad para que nos ejercitemos en ellas y merezcamos la gloria.
Mas ahora que creéis en Cristo Jesús , vosotros que en otro tiempo estabais alejados de Dios y de sus promesas, os habéis puesto cerca por la sangre de Jesucristo.
Y él es la cabeza del cuerpo de la Iglesia y el principio de la resurrección , el primero a renacer de entre los muertos, para que en todo tenga él la primacía;