Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Eclesiastés 5:9 - Biblia Torres Amat 1825

y hay, en fin, sobre todos un soberano, a quien toda la tierra sirve reverente.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Además, el provecho de la tierra es para todos; el rey mismo está sujeto a los campos.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

¡Hasta el rey saca todo lo que puede de la tierra para su propio beneficio!

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

El que ama el dinero nunca tiene lo suficiente: ¿por qué, entonces, perseguir una satisfacción que nunca llegará? Esto no tiene sentido.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

Pero en todo sentido, el provecho de un país es que el rey mismo se preocupe por su territorio.°

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Quien ama el dinero, nunca tiene bastante; quien ama la opulencia, no le saca provecho. También eso es vanidad.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Además el provecho de la tierra es para todos; el rey mismo está sujeto a los campos.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Eclesiastés 5:9
15 Referans Kwoze  

El cielo empíreo es para el Señor; mas la tierra la dio a sus hijos de los hombres.


En los barbechos que se heredan de los padres nacen abundantes frutos; pero por falta de juicio se recogen para otros.


El que labra su tierra, tendrá pan de sobra; pero el que ama la ociosidad, estará lleno de miseria.


Un hombre solo que no tiene heredero, ni hijo ni hermano; y sin embargo no cesa de afanarse, ni se hartan de bienes sus ojos; ni le ocurre el preguntarse a sí mismo: ¿Yo para quién trabajo? ¿Y por qué me privo del uso de estos bienes? Vanidad es ésta también y aflicción grandísima del ánimo.


El avariento jamás se saciará de dinero, y quien ama ciegamente las riquezas ningún fruto sacará de ellas. Luego también es esto vanidad.


Si vieres la opresión de los pobres, la violencia que reina en los juicios y el trastorno de la justicia en una provincia, no hay que turbarte por este desorden; pues aquel que está en alto puesto, tiene otro sobre sí, y sobre éstos aun hay otros más elevados,


Todo el afán del hombre es para saciar su boca o apetito; mas su alma, que es inmortal, no quedará con esto saciada.