Y vio Dios todas las cosas que había hecho; y eran en gran manera buenas. Con lo que de la tarde y de la mañana se formó el día sexto.
Eclesiastés 2:11 - Biblia Torres Amat 1825 Mas volviendo la vista hacia todas las obras de mis manos, y considerando los trabajos en que tan inútilmente me había afanado, vi que todo era vanidad y aflicción de espíritu, y que nada hay estable en este mundo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol. Biblia Nueva Traducción Viviente pero al observar todo lo que había logrado con tanto esfuerzo, vi que nada tenía sentido; era como perseguir el viento. No había absolutamente nada que valiera la pena en ninguna parte. Biblia Católica (Latinoamericana) Luego, reflexioné en todas las obras que había emprendido y en todas las molestias que me había costado su realización. Pues bien, no se retiene nada, se corre tras el viento; ¡no hay nada que ganar bajo el sol!' La Biblia Textual 3a Edicion Luego, consideré todas las obras que habían hecho mis manos, y el duro trabajo con que me había afanado en hacerlas, ¡y he aquí todo era vanidad y correr tras el viento! No había provecho alguno debajo del sol. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Luego he reflexionado sobre todas las obras que hicieron mis manos y las fatigas que en ellas había puesto, y veo que todo es vanidad y atrapar viento: no existe provecho bajo el sol. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Miré luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol. |
Y vio Dios todas las cosas que había hecho; y eran en gran manera buenas. Con lo que de la tarde y de la mañana se formó el día sexto.
Acuérdate cuán débil es mi ser. ¿Acaso tú has creado en vano todos los hijos de los hombres?
Las cuales cosas luego que Moisés las vio todas enteramente acabadas, los llenó de bendiciones.
Yo he visto todo cuanto se hace debajo del sol, y he hallado ser todo vanidad y aflicción del espíritu.
aplicado he igualmente mi corazón al conocimiento de la prudencia, y de la doctrina, y de los errores y desaciertos. Mas he visto que aun esto mismo era todo trabajo y aflicción de espíritu.
¿Qué saca el hombre de todo el trabajo con que se afana sobre la tierra o debajo de la capa del sol?
El avariento jamás se saciará de dinero, y quien ama ciegamente las riquezas ningún fruto sacará de ellas. Luego también es esto vanidad.
Verdaderamente que es ésta una desdicha bien lamentable; como vino al mundo, así se volverá; ¿qué le aprovecha haberse afanado en balde?
¿Acaso no están predichas estas cosas por el Señor de los ejércitos? Porque en vano, dice el Señor, se afanarán los pueblos, y las gentes allegarán bienes para pábulo de un gran fuego, y desfallecerán.
Porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda que tampoco podremos llevarnos nada.