cuando convirtió en sangre los ríos y demás aguas para que los egipcios no pudieran beber;
Apocalipsis 16:4 - Biblia Torres Amat 1825 El tercer ángel derramó su taza sobre los ríos y sobre los manantiales de aguas, y se convirtieron en sangre. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el tercer ángel derramó su copa sobre los ríos y los manantiales, y estos se convirtieron en sangre. Biblia Católica (Latinoamericana) El tercer ángel vació su copa sobre los ríos y sobre los manantiales de agua, que se convirtieron en sangre. La Biblia Textual 3a Edicion El tercero derramó su copa en los ríos y las fuentes de aguas, y se convirtió° en sangre.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 El tercero derramó su copa sobre los ríos y sobre las fuentes de las aguas; y se convirtieron en sangre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se tornaron en sangre. |
cuando convirtió en sangre los ríos y demás aguas para que los egipcios no pudieran beber;
Dijo, pues, el Señor a Moisés: Dile a Aarón: Extiende tu mano sobre los ríos y sobre los arroyos y las lagunas, y haz salir ranas sobre la tierra de Egipto.
Porque yo vine al mundo, y no hubo nadie que me recibiese; llamé y no hubo quien me escuchase. ¿Es por ventura que se ha acortado o achicado mi mano, de suerte que no pueda redimir? ¿O no tengo yo poder para libertaros? Sabed que a una amenaza mía haré del mar un desierto, y secaré los ríos; se pudrirán los peces por falta de agua, y morirán en seco.
Y henchiré sus montes de sus muertos, pasados serán a cuchillo sobre tus collados, y en tus valles, y en tus arroyos.
Porque el infierno o sepulcro dividirá unos hermanos de otros. El Señor enviará un viento abrasador que se levantará del desierto, el cual agotará sus manantiales y secará sus fuentes. El rey arrebatará del país todos los más preciosos tesoros.
Mas después que concluyeren de dar su testimonio, la bestia que sube del abismo moverá guerra contra ellos, y los vencerá, y les quitará la vida.
diciendo a grandes voces: Temed al Señor, y honradle, o dadle gloria, porque venida es la hora de su juicio; y adorad a aquel que hizo el cielo, y la tierra, y el mar, y las fuentes de las aguas.
Aquí oí al ángel que tiene el cuidado de las aguas, que decía: Justo eres, Señor, tú que eres y has sido siempre santo en estos juicios que ejerces.