Mas entretanto, ¿quién se pondrá de mi parte contra los malvados?; ¿quién saldrá a favor mío contra los que obran la iniquidad?
3 Juan 1:8 - Biblia Torres Amat 1825 Yo quizá hubiera escrito a la Iglesia; pero ese Diótrefes, que ambiciona la primacía entre los demás, nada quiere saber de nosotros. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Nosotros, pues, debemos acoger a tales personas, para que cooperemos con la verdad. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo tanto, somos nosotros los que debemos apoyarlos y así ser sus colaboradores cuando enseñan la verdad. Biblia Católica (Latinoamericana) Debemos acoger a tales personas si queremos trabajar por la verdad. La Biblia Textual 3a Edicion Debemos pues sostener a los tales, para que seamos colaboradores con la diseminación° de la verdad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por lo tanto, somos nosotros los que debemos acoger a tales hermanos, para trabajar juntos en la verdad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Nosotros, pues, debemos recibir a los tales, para que seamos cooperadores con la verdad. |
Mas entretanto, ¿quién se pondrá de mi parte contra los malvados?; ¿quién saldrá a favor mío contra los que obran la iniquidad?
Caso que no quieran recibiros, ni escuchar vuestras palabras, saliendo fuera de la casa o ciudad, sacudid el polvo de vuestros pies.
Quien a vosotros recibe, a mí me recibe; y quien a mí me recibe, recibe a aquel que me ha enviado a mí.
aunque aquél desde adentro le responda: No me molestes, la puerta está ya cerrada, y mis criados están como yo acostados, no puedo levantarme a dártelos;
Y así nosotros como cooperadores del Señor, os exhortamos a no recibir en vano la gracia de Dios.
lo mismo que a Tito, mi socio y coadjutor entre vosotros, y a los demás hermanos que le acompañan y son los apóstoles o enviados de las iglesias y la gloria de Cristo .
También te pido a ti, ¡oh fiel compañero!, que asistas a ésas que conmigo han trabajado por el Evangelio con Clemente y los demás coadjutores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida.
Os saluda también Jesús , por sobrenombre Justo, éstos son de los circuncisos, o de los hebreos convertidos; y ellos solos son los que me ayudan a anunciar el reino de Dios, y me han servid de consuelo.
Y despachamos a Timoteo, hermano nuestro y ministro de Dios en la predicación de la buena nueva de Jesucristo, para confirmaros y esforzaros en vuestra fe,
gracia y paz a vosotros, de parte de Dios nuestro Padre y del Señor Jesucristo.
Tú, querido mío, no has de imitar el mal ejemplo, sino el bueno. El que hace bien, es de Dios; el que hace mal, no mira a Dios.
Por eso mismo nosotros debemos acoger a los tales a fin de cooperar a la propagación de la verdad o de la buena nueva.
Por tanto, si voy allá, yo denunciaré sus procedimientos, haciéndole ver cuán mal hace en ir vertiendo especies malignas contra nosotros; y como si esto no le bastase, no solamente no hospeda él a nuestros hermanos, sino que a los que les dan acogida se lo veda y los echa de la Iglesia.