Y plañeron y lloraron, y ayunaron hasta la tarde por amor de Saúl y de Jonatás, su hijo, y del pueblo del Señor, y de la casa de Israel, porque habían sido pasados a cuchillo.
2 Samuel 3:32 - Biblia Torres Amat 1825 Sepultado que fue Abner en Hebrón, levantó el grito el rey David, y lloró sobre el sepulcro de Abner, acompañándole asimismo en el llanto todo el pueblo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y sepultaron a Abner en Hebrón; y alzando el rey su voz, lloró junto al sepulcro de Abner; y lloró también todo el pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que enterraron a Abner en Hebrón, y el rey y todo el pueblo lloraron junto a la tumba. Biblia Católica (Latinoamericana) Durante el entierro en Hebrón, el rey habló en alta voz y lloró ante la tumba; todo el pueblo lloró con él. La Biblia Textual 3a Edicion Y sepultaron a Abner en Hebrón. Y el rey alzó su voz y lloró junto al sepulcro de Abner, y lloró también todo el pueblo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sepultaron a Abner en Hebrón. El rey rompió a llorar en voz alta junto al sepulcro de Abner y con él todo el pueblo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sepultaron a Abner en Hebrón; y alzando el rey su voz, lloró junto al sepulcro de Abner; y lloró también todo el pueblo. |
Y plañeron y lloraron, y ayunaron hasta la tarde por amor de Saúl y de Jonatás, su hijo, y del pueblo del Señor, y de la casa de Israel, porque habían sido pasados a cuchillo.
Entonces el rey, lleno de tristeza, subió a la torre o cuarto que estaba sobre la puerta, y se echó a llorar, diciendo mientras subía: ¡Hijo mío Absalón! ¡Absalón, hijo mío! ¡Quién me diera, Absalón hijo mío, que yo muriera por ti! ¡Oh hijo mío Absalón!
Dio, pues, David la orden a su gente, y los mataron; y cortándoles las manos y los pies, los colgaron junto al estanque de Hebrón; pero la cabeza de Isboset la pusieron en el sepulcro de Abner en Hebrón.
si me holgué de la ruina del que me aborrecía, y celebré con aplauso el mal que le vino, castígueme Dios.
No te alegres de la caída de tu enemigo, ni se regocige tu corazón en su ruina,
levantaron el grito David y la tropa que le acompañaba, desechos en lágrimas hasta más no poder.