A lo que dijo Miqueas: Si tú vuelves victorioso, el Señor no habló por mi boca. Y añadió: Pueblos todos estad alerta, y sedme testigos.
2 Corintios 13:8 - Biblia Torres Amat 1825 Porque nada podemos contra la verdad y justicia, sino que todo nuestro poder es a favor de la verdad. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque nada podemos contra la verdad, sino por la verdad. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues no podemos oponernos a la verdad, más bien siempre debemos defender la verdad. Biblia Católica (Latinoamericana) Pues no tenemos poder alguno contra la verdad, sino sólo a favor de ella, La Biblia Textual 3a Edicion Porque nada podemos hacer° contra la verdad, sino a favor de la verdad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues nada podemos contra la verdad, sino sólo a favor de la verdad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque nada podemos contra la verdad, sino por la verdad. |
A lo que dijo Miqueas: Si tú vuelves victorioso, el Señor no habló por mi boca. Y añadió: Pueblos todos estad alerta, y sedme testigos.
Contra el Señor no hay sabiduría, no hay prudencia, no hay consejo que valga.
La maldición pronunciada sin causa contra alguno, pasará sin detenerse por encima de él, como el ave que pasa volando a otro clima, y el pájaro que gira a su placer.
No hay para qué prohibírselo, respondió Jesús , puesto que nadie que haga milagros en mi nombre podrá luego hablar mal de mí.
Porque, aun cuando yo me gloriase un poco más de la potestad que el Señor nos dio para vuestra edificación, y no para vuestra ruina, no tendré de qué avergonzarme;
Por tanto, os escribo estas cosas estando ausente a fin de que presente no haya de proceder con rigor, usando de la potestad que Dios me ha dado, la cual es para la edificación y no para ruina o destrucción.
Y rogamos a Dios que no cometáis mal alguno, y no al contrario que nosotros aparezcamos ser lo que somos con la ostensión de nuestro poder, sino que obréis bien, aun cuando parezcamos nosotros haber decaído de lo que somos.
Así es que nos gozamos de que estéis fuertes en la virtud, y que nosotros parezcamos débiles o sin poder. Y pedimos igualmente a Dios que os haga perfectos.
Recomiendo, pues, ante todas cosas que se hagan súplicas, oraciones, rogativas, acciones de gracias, por todos los hombres,