Muchas son las tribulaciones de los justos; pero de todas los librará el Señor.
2 Corintios 1:10 - Biblia Torres Amat 1825 El cual nos ha librado y nos libra aun de tan graves peligros de muerte; y en quien confiamos que todavía nos ha de librar, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte; Biblia Nueva Traducción Viviente Efectivamente él nos rescató del peligro mortal y volverá a hacerlo de nuevo. Hemos depositado nuestra confianza en Dios, y él seguirá rescatándonos, Biblia Católica (Latinoamericana) El nos libró de ese peligro de muerte tan grande, y nos seguirá protegiendo. En él hemos puesto nuestra esperanza y seguirá amparándonos, La Biblia Textual 3a Edicion el cual nos libró de tan gran muerte, y nos librará;° en quien hemos esperado, y aún nos librará; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él nos libró de una muerte tan segura y nos librará. En Él hemos puesto la esperanza de que nos seguirá librando. Biblia Reina Valera Gómez (2023) el cual nos libró, y nos libra; y en quien confiamos que aún nos librará de tan grande muerte; |
Muchas son las tribulaciones de los justos; pero de todas los librará el Señor.
Escuchadme, ¡oh casa de Jacob !, y vosotros todos, restos de la casa de Israel, a quienes llevo en mi seno, y traigo en mis entrañas.
Porque he aquí que nuestro Dios, a quien adoramos, puede librarnos del horno del fuego ardiente, y sustraernos, oh rey, de tus manos.
Entonces dio el rey la orden, y trajeron a Daniel, y le echaron en el lago de los leones. Y dijo el rey a Daniel: Tu Dios, a quien siempre adoras, él te librará.
Por esta causa los judíos me prendieron, estando yo en el templo, e intentaban matarme.
para que sea librado de los judíos incrédulos, que hay en Judea, y la ofrenda de mi ministerio, o la limosna que llevo, sea bien recibida de los santos en Jerusalén ,
Pero si sentimos pronunciar allá dentro de nosotros el fallo de nuestra muerte, fue a fin de que no pusiésemos nuestra confianza en nosotros, sino en Dios, que resucita a los muertos.
El Señor me librará de todo pecado, y me conducirá a su reino celestial, a él sea dada la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
y sobre todo aquellos que para satisfacer sus impuros deseos siguen la concupiscencia de la carne, y desprecian las potestades; osados, pagados de sí mismos, que blasfemando no temen sembrar herejías,
Y añadió David: El Señor que me libró de las garras del león y del oso, él mismo me librará también de las manos de ese filisteo. Dijo Saúl a David: Anda, pues, y el Señor sea contigo.
Tomó, pues, Samuel una piedra, y la puso entre Masfa y Sen, y llamó aquel lugar Piedra del Socorro, diciendo: Hasta este lugar nos ha socorrido el Señor.