La lengua pacífica es árbol de la vida; pero la desenfrenada quebrantará el corazón.
1 Timoteo 6:3 - Biblia Torres Amat 1825 es un soberbio orgulloso, que nada sabe, sino que antes bien enloquece o flaquea de cabeza sobre cuestiones y disputas de palabras, de donde se originan envidias, contiendas, blasfemias, siniestras sospechas, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, Biblia Nueva Traducción Viviente Puede ser que algunas personas nos contradigan, pero lo que enseñamos es la sana enseñanza de nuestro Señor Jesucristo, la cual conduce a una vida de sumisión a Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Si alguno enseña en otra forma y no se atiene a las palabras auténticas, que son las de Cristo Jesús, nuestro Señor, y a la enseñanza que honra a Dios, La Biblia Textual 3a Edicion Si alguno enseña otra cosa, y no se amolda a las sanas palabras, las de Jesús el Mesías, nuestro Señor, y a la doctrina que es conforme a la piedad, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si alguien propaga otras enseñanzas y no presta atención a los preceptos saludables, los de nuestro Señor Jesucristo, y a la recta enseñanza religiosa, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si alguno enseña otra cosa, y no asiente a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, |
La lengua pacífica es árbol de la vida; pero la desenfrenada quebrantará el corazón.
Y le respondieron: De César. Entonces les replicó: Pues dad a César lo que es de César y a Dios lo que es de Dios.
enseñándolas a observar todas las cosas que yo os he mandado. Y estad ciertos que yo mismo estaré siempre con vosotros, hasta la consumación de los siglos.
Y os ruego, hermanos, que os recatéis de aquellos que causan entre vosotros divisiones y escándalos, enseñando contra la doctrina que vosotros habéis aprendido; y evitad su compañía;
Por lo que mira a la caridad fraterna no hay necesidad de escribiros; pues vosotros mismos aprendisteis de Dios a amaros unos a otros,
la cual es conforme a la buena nueva gloriosa de Dios bendito, que se me ha encomendado.
ni se ocupasen en fábulas y genealogías interminables, que son más propias para excitar disputas que para formar por la fe el edificio de Dios.
queriendo hacer de doctores de la ley sin entender lo que hablan ni lo que aseguran.
Guarda ese rico depósito por medio del Espíritu Santo, que habita en nosotros.
y que da la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no puede mentir, ha prometido y destinado antes de todos los siglos,
Porque aun hay muchos desobedientes, charlatanes y embaucadores, sobre todo de los circuncisos, o judíos convertidos,
Pero cuestiones necias, genealogías, contiendas, y debates sobre la ley, evítalas, porque son inútiles y vanas.