Ea, pues, descendamos, y confundamos allí mismo su lengua, de manera que el uno no entienda el habla del otro.
1 Corintios 14:2 - Biblia Torres Amat 1825 Pues quien habla lenguas sin tener dicho don, no habla para los hombres, porque nadie le entiende, sino para Dios, habla sí en espíritu cosas misteriosas. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues, si alguien tiene la capacidad de hablar en lenguas, le hablará solamente a Dios, dado que la gente no podrá entenderle. Hablará por el poder del Espíritu, pero todo será un misterio. Biblia Católica (Latinoamericana) El que habla en lenguas habla a Dios, pero no a los hombres, pues nadie le entiende cuando habla en espíritu y dice cosas misteriosas. La Biblia Textual 3a Edicion Porque el que habla en lenguas, no habla a los hombres, sino a Dios, pues nadie lo entiende, pues por el Espíritu habla misterios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues el que habla lenguas, no habla para los hombres, sino para Dios, ya que nadie lo entiende, aunque en espíritu hable misterios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque el que habla en lengua desconocida, no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque en espíritu hable misterios. |
Ea, pues, descendamos, y confundamos allí mismo su lengua, de manera que el uno no entienda el habla del otro.
Entonces Eliacim, hijo de Helcías, y Sobna, y Joahe dijeron a Rabsaces: Te rogamos que nos hables a nosotros, tus siervos, en siríaco, pues entendemos esa lengua, y no en lengua hebrea, la cual entiende el pueblo que está sobre la muralla.
La abriré profiriendo parábolas; diré cosas recónditas desde el principio del mundo,
El cual les respondió: Porque a vosotros se os ha dado el privilegio de conocer los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no se les ha dado;
A los que creyeren, acompañarán estos milagros: En mi nombre lanzarán los demonios, hablarán nuevas lenguas,
Y él les decía: A vosotros se os ha concedido el saber o conocer el misterio del reino de Dios; pero a los extraños, todo se les anuncia en parábolas,
Y habiéndoles Pablo impuesto las manos, descendió sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban varias lenguas, y profetizaban.
Los que me acompañaban, aunque vieron la luz, no entendieron bien la voz del que hablaba conmigo.
Gloria a aquel que es poderoso para fortaleceros en mi buena nueva y en la doctrina de Jesucristo que yo predico, según la revelación del misterio de la redención; misterio que después de haber permanecido oculto en todos los siglos pasados,
a quién el don de hacer milagros, a quién el don de profecía, a quién discreción de espíritus, a quién don de hablar varios idiomas, a quién el de interpretar las palabras, o razonamientos.
Así es que ha puesto Dios varios miembros en la Iglesia, unos en primer lugar, apóstoles; en segundo lugar profetas, en el tercero doctores, luego a los que tienen el don de hacer milagros, después a los que tienen gracia de curar, de socorrer al prójimo, don de gobierno, de hablar todo género de lenguas, de interpretar las palabras.
Aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y el lenguaje de los ángeles mismos, si no tuviere amor o caridad, vengo a ser como un metal que suena, o campana que retiñe.
Y aunque tuviera el don de profecía, y penetrase todos los misterios, y poseyese todas las ciencias; aunque tuviera toda la fe posible, de manera que trasladase de una a otra parte los montes, no teniendo amor, soy un nada.
Por lo demás, si tú alabas a Dios solamente con el espíritu, el que está en la clase del sencillo pueblo, ¿cómo ha de decir: Amén, esto es, Así sea, al fin de tu acción de gracias?, puesto que no entiende lo que tú dices.
Pues ¿qué es lo que se ha de hacer, hermanos míos? Vedlo aquí: Si cuando os congregáis, uno de vosotros se halla inspirado de Dios para hacer un himno, otro para instruir, éste para revelar alguna cosa de Dios, aquél para hablar lenguas, otro para interpretarlas, hágase todo para edificación de los fieles.
Ved aquí, hermanos, un misterio que voy a declararos: Todos a la verdad resucitaremos; mas no todos seremos cambiados en hombres celestiales.
A nosotros nos lo ha revelado Dios por medio de su Espíritu; pues el Espíritu de Dios todas las cosas penetra, aun las más íntimas de Dios.
sino que predicamos la sabiduría de Dios en el misterio de la encarnación, sabiduría recóndita, la cual predestinó y preparó Dios antes de los siglos para gloria nuestra,
y por mí también, a fin de que se me conceda saber desplegar mis labios para predicar con libertad, manifestando el misterio del Evangelio,
Desde un país remoto, del cabo del mundo hará venir el Señor contra ti, con la rapidez que vuela el águila, y se echa impetuosamente sobre la presa una nación cuya lengua no podrás entender:
a fin de que sean consolados sus corazones, y que estando bien unidos por la caridad, sean llenados de todas las riquezas de una perfecta inteligencia, para conocer el misterio de Dios Padre, y de Jesucristo,
Pero el Espíritu Santo dice claramente que en los venideros tiempos han de apostatar algunos de la fe, dando oídos a espíritus falaces y a doctrinas diabólicas,
Y por tanto sean éstos antes probados; y así entren en el ministerio, no siendo tachados de ningún delito.
Y oí la voz del cielo que hablaba otra vez conmigo, y decía: Anda, y toma el libro abierto de la mano del ángel que está sobre el mar y sobre la tierra.