Luego se tendió tres veces sobre el niño, y clamó a YHVH diciendo: ¡Oh YHVH, Dios mío, te ruego, haz volver el alma de este niño a él!
Santiago 5:14 - La Biblia Textual 3a Edicion ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Haga llamar a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndolo con aceite° en el nombre del Señor. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Alguno está enfermo? Que llame a los ancianos de la iglesia, para que vengan y oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Hay alguno enfermo? Que llame a los ancianos de la Iglesia, que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Está alguno enfermo? Haga llamar a los presbíteros de la Iglesia, que oren sobre él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Si alguno está enfermo, que llame a los líderes de la iglesia, para que oren por él; entonces ellos le untarán aceite y le pedirán al Señor que lo sane. |
Luego se tendió tres veces sobre el niño, y clamó a YHVH diciendo: ¡Oh YHVH, Dios mío, te ruego, haz volver el alma de este niño a él!
Pero Naamán se retiró airado, diciendo: He aquí yo pensaba: Seguramente saldrá a mi encuentro, se detendrá, e invocará el nombre de YHVH su Dios, y agitará su mano frente el lugar,° y curará la lepra.
y echaban fuera muchos demonios, y ungían con aceite a muchos enfermos y los sanaban.°
lo cual en efecto hicieron, enviándolo a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo.
Y después que les designaron ancianos en cada iglesia y oraron con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.
Al llegar a Jerusalem, fueron recibidos por la iglesia, los apóstoles y los ancianos, e informaron de todo lo que Dios había hecho con ellos.
Y aconteció que el padre de Publio yacía° en cama, enfermo de fiebre y disentería; y entrando Pablo a verlo, después de orar, le impuso las manos y lo sanó.°
Entonces Pedro, sacando a todos, y puesto de rodillas,° oró; y volviéndose hacia el cuerpo, dijo: ¡Tabitá, levántate! Y ella abrió sus ojos, y viendo a Pedro, se incorporó.
Por esta razón te dejé en Creta: Para que pusieras en orden lo que faltaba y designaras ancianos en cada ciudad, como te ordené: