Oh simples ¿hasta cuándo amaréis la simpleza, Y vosotros, insolentes, os complaceréis en la insolencia, Y vosotros, insensatos, aborreceréis el saber?
Romanos 1:14 - La Biblia Textual 3a Edicion Deudor soy a los griegos y también a los bárbaros,° a los sabios y también a los ignorantes. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues siento una gran obligación tanto con los habitantes del mundo civilizado como con los del resto del mundo, con los instruidos y los incultos por igual. Biblia Católica (Latinoamericana) Pues me siento en obligación con todos, ya sean griegos o extranjeros, cultos o sin estudios, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yo me debo tanto a griegos como a bárbaros, a sabios como a ignorantes; Biblia Reina Valera Gómez (2023) A griegos y a bárbaros; a sabios y a no sabios soy deudor. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Tengo que anunciar esta buena noticia a todo el mundo, no importa que sepan mucho o no sepan nada, ni que sean humildes o importantes. Por eso tengo tantos deseos de ir a Roma. |
Oh simples ¿hasta cuándo amaréis la simpleza, Y vosotros, insolentes, os complaceréis en la insolencia, Y vosotros, insensatos, aborreceréis el saber?
Oh simples, aprended prudencia, Y vosotros, insensatos, sed de corazón inteligente.
Y habrá allí calzada y camino,° Y será llamado Camino de Santidad. No pasará inmundo por él. El que ande por este Camino, Por torpe que sea, no se extraviará, Porque Él mismo estará con ellos.
En aquel tiempo, tomando Jesús la palabra, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de sabios y entendidos, y las revelaste a los niños.
En aquella misma hora se regocijó sobremanera en el Espíritu Santo,° y dijo: ¡Te alabo,° oh Padre, Señor del cielo y de la tierra! porque escondiste estas cosas de sabios y entendidos y las revelaste a niños. Sí, Padre, porque así te agradó.°
Y los nativos° nos trataron con no poca humanidad, porque a causa de la lluvia que caía y del frío, encendieron un fuego y nos recibieron a todos.
Los nativos° entonces, cuando vieron el animal° que colgaba de su mano, decían unos a otros: Sin ninguna duda, este hombre es un homicida, pues aunque se ha salvado del mar, la Justicia° no lo ha dejado vivir.
Pero el Señor le dijo: Ve, porque instrumento de elección° me es éste para llevar mi nombre delante de las naciones, y también de reyes, y de los hijos de Israel;
Porque no quiero hermanos que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes acerca de vosotros mismos: que un endurecimiento parcial ha ocurrido a Israel, hasta que entre la plenitud de los gentiles.
teniendo el mismo sentir los unos con los otros, no siendo altivos, sino asociándoos con los humildes.° No seáis sabios° en vuestra opinión;°
No debáis a nadie nada, sino el amaros unos a otros, porque el que ama al prójimo,° ha cumplido la ley.
Porque vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, así que me gozo a causa de vosotros; pero quiero que seáis sabios° para lo bueno, e ingenuos° para lo malo.
Así que entonces, hermanos, somos deudores, no a la carne, para vivir conforme a la carne.
pero si no entiendo el significado de la voz, seré un extranjero para el que habla, y el que habla, un extranjero para mí.
Porque si bendices con el espíritu, ¿cómo dirá amén a tu acción de gracias el que ocupa el lugar de simple oyente, si no sabe lo que dices?
Lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las enseñadas por el Espíritu, adaptando° lo espiritual a lo espiritual.
Nadie se engañe a sí mismo. Si alguno entre vosotros piensa ser sabio en el tiempo presente, hágase necio para llegar a ser sabio.
Porque no nos atrevemos a clasificarnos ni compararnos con algunos que se alaban a sí mismos, porque ellos, midiéndose a sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo mismos, no son sensatos.
donde no hay griego ni judío, circuncisión o incircuncisión, bárbaro, escita, esclavo o libre, sino que el Mesías es todo y en todos.
Por eso soporto todas estas cosas, por amor a los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que hay en Jesús el Mesías con gloria eterna.
Porque nosotros también éramos en otro tiempo necios, desobedientes, extraviados, esclavizados por pasiones y placeres diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles y aborreciéndonos unos a otros.