Talló asimismo en ellas querubines, palmeras y flores abiertas, y las recubrió de oro ajustado a los grabados.
Ezequiel 41:18 - La Biblia Textual 3a Edicion estaba labrado con querubines y palmas. Había una palma entre querubín y querubín, y cada querubín tenía dos rostros: Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y estaba labrada con querubines y palmeras, entre querubín y querubín una palmera; y cada querubín tenía dos rostros; Biblia Nueva Traducción Viviente Todas las paredes estaban decoradas con querubines tallados, cada uno con dos caras, y había una palmera tallada entre cada querubín. Biblia Católica (Latinoamericana) Estaba formada por querubines y palmas, había una palma entre dos querubines; los querubines tenían dos caras:' Biblia Serafín de Ausejo 1975 de querubines y con figuras de palmeras, una palmera entre querubín y querubín. Cada querubín tenía dos rostros: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y estaba labrada con querubines y palmeras; entre querubín y querubín una palmera; y cada querubín tenía dos rostros. |
Talló asimismo en ellas querubines, palmeras y flores abiertas, y las recubrió de oro ajustado a los grabados.
y sobre los marcos que había entre los paneles, había figuras de leones, bueyes y querubines; y sobre los paneles, tanto encima como debajo de los leones y de los bueyes, había molduras en bajorrelieve.
Sobre las planchas de sus soportes y de sus marcos grabó querubines, leones y palmeras, según el espacio de cada uno, con molduras en derredor.
La nave principal la cubrió con madera de ciprés, y la recubrió del mejor oro, y la adornó con° palmas y cadenas esculpidas.
Recubrió de oro la Casa: las vigas, los umbrales, y sus paredes y puertas, y esculpió querubines en las paredes.
El aspecto de sus rostros era como rostro de hombre, pero los cuatro tenían también° cara de león, a la derecha; los cuatro tenían cara de buey, a la izquierda; y los cuatro tenían también cara de águila. Así eran sus caras.
Ahora bien, cada uno° tenía cuatro caras: La primera era rostro de querubín, la segunda, rostro de hombre, la tercera, cara de león, y la cuarta, cara de águila.
Cada uno tenía cuatro caras y cada uno cuatro alas, y había como la apariencia de las manos de un hombre debajo de sus alas.
Había ventanas anchas por dentro y angostas por fuera, que daban hacia los aposentos en el interior y alrededor de la puerta. Igualmente, su vestíbulo tenía ventanas alrededor y hacia el interior, y en cada pilar había palmas esculpidas.
Sus ventanas, las arcadas y sus palmas medían conforme a la medida de la puerta que miraba al oriente. Se subía a ella por siete gradas, delante de las cuales estaba la columnata.
por encima de la entrada, hasta el interior y aun el exterior de la Casa. El muro, todo en derredor, por dentro y por fuera, según sus medidas,
Desde el suelo hasta la parte superior de la puerta, había querubines y palmas representados en el muro.
Y había en ellos querubines y palmas, esculpidos como los del muro; y había gruesas vigas de madera sobre el frente del pórtico exterior.
Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de toda nación y tribu, y pueblos y lenguas, que estaban en pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos de ropas blancas, con palmas en sus manos.