Ezequiel 37:10 - La Biblia Textual 3a Edicion Y profeticé como me había sido mandado, y el espíritu entró en ellos, y vivieron, y se pusieron sobre sus pies: una multitud grande en extremo. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en extremo. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que yo anuncié el mensaje como él me ordenó y entró aliento en los cuerpos. Todos volvieron a la vida y se pusieron de pie; era un gran ejército. Biblia Católica (Latinoamericana) Profeticé según la orden que había recibido y el espíritu entró en ellos; recuperaron la vida se levantaron sobre sus pies: era una multitud grande, inmensa. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Profeticé como se me había mandado, y entonces entró en ellos el aliento, revivieron y se pusieron de pie. Era un ejército inmenso. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies, un ejército grande en extremo. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Yo le repetí al aliento de vida lo que Dios me ordenó decirle, y el aliento de vida entró en los huesos. Entonces los huesos revivieron y se pusieron de pie. ¡Eran tantos que parecían un ejército! |
Y de ella saldrán cánticos de alabanza, Y voces de gente jubilosa. Los haré crecer y no menguar, Los honraré, y no serán menospreciados.
Como no puede ser contado el ejército de los cielos, ni se puede medir la arena del mar, así multiplicaré la descendencia de mi siervo David y los levitas que me sirven.
Y yo hice así como me fue ordenado: salí de día llevando mis enseres, como si partiera al exilio, y a la tarde horadé la pared con mi propia mano, y de noche llevé conmigo mis enseres en la oscuridad, cargándolos sobre los hombros a vista de ellos.
Así dice Adonay YHVH a estos huesos: He aquí, Yo hago entrar espíritu en vosotros, y viviréis.
Pero después de los tres días y medio, entró en ellos un aliento de vida procedente de Dios,° y se pusieron sobre sus pies,° y un gran temor cayó sobre quienes los contemplaban.