Judea será espanto para Egipto; Su sola mención le producirá terror, Por el designio que YHVH Sebaot ha determinado contra Egipto.
Ezequiel 30:9 - La Biblia Textual 3a Edicion En aquel tiempo saldrán de delante de mí mensajeros en naves, para espantar a la confiada Etiopía, y la angustia vendrá sobre ellos como en el día de Egipto, porque he aquí viene. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 En aquel tiempo saldrán mensajeros de delante de mí en naves, para espantar a Etiopía la confiada, y tendrán espanto como en el día de Egipto; porque he aquí viene. Biblia Nueva Traducción Viviente En ese tiempo enviaré veloces mensajeros por barco para aterrorizar a los tan confiados etíopes. Un gran pánico se apoderará de ellos el día de la indudable destrucción de Egipto. ¡Espérenlo! ¡Sin falta, llegará! Biblia Católica (Latinoamericana) Irán mensajeros hasta Kuch, allá se pondrán todos a temblar al saber de su caída: ese día ya viene. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Aquel día saldrán mensajeros de mi parte, en naves, para difundir el terror en la confiada Etiopía; y habrá pánico entre ellos el día de Egipto, porque he aquí que ya llega. Biblia Reina Valera Gómez (2023) En aquel tiempo saldrán mensajeros de delante de mí en navíos, para espantar a Etiopía la confiada, y tendrán espanto como en el día de Egipto; porque he aquí viene. Biblia Traducción en Lenguaje Actual ”Etiopía está muy confiada, pero yo enviaré mensajeros por mar para que la espanten cuando yo castigue a Egipto. ¡Ese día ya está cerca! |
Judea será espanto para Egipto; Su sola mención le producirá terror, Por el designio que YHVH Sebaot ha determinado contra Egipto.
Después dijo YHVH: Así como mi siervo Isaías anduvo desnudo y descalzo tres años como señal y presagio contra Egipto y Etiopía,
Aquel día los moradores de esta costa se asustarán y avergonzarán por la suerte de Etiopía, su esperanza, y de Egipto, su esplendor, y dirán:
En cuanto la noticia llegue a Egipto, Se estremecerán por la nueva de Tiro.
Ahora pues, escucha esto, oh mujer° lasciva, Tú, que reinabas confiadamente, y te decías: Yo y nadie más que yo. No me quedaré viuda, ni perderé a mis hijos.
Al estruendo de la caída tiembla la tierra; Clamor cuyo eco se oye en el Mar Rojo.
¡En pie! Marchad contra un pueblo confiado, Que habita tranquilo, sin puertas ni cerrojos y vive solitario, dice YHVH.
Yo, YHVH, he hablado. Ello ocurrirá y Yo lo cumpliré. No retrocederé ni me compadeceré ni desistiré. Te juzgarán conforme a tus caminos y conforme a tus obras, dice Adonay YHVH.
Bajarán de sus tronos todos los príncipes marinos, se despojarán sus mantos, y se quitarán sus ropas bordadas; se vestirán de espanto y, sentados en el suelo, se estremecerán consternados, horrorizados a causa de ti.
Todos los moradores de las costas están atónitos a causa de ti, Sus reyes tiemblan de espanto, Sus rostros están abatidos,
Pero cuando venga aquello, y ciertamente viene, sabrán que un profeta estuvo entre ellos.
y dirás: Subiré contra una tierra indefensa, iré contra gentes tranquilas que habitan confiadas todas ellas, que habitan en ciudades sin murallas, sin puertas y sin cerrojos.
Y enviaré fuego sobre Magog, y sobre los que moran con seguridad en las costas, y sabrán que Yo soy YHVH.
Adonay YHVH ha jurado por su santidad: He aquí vendrán días sobre vosotras° en que se os llevará con garfios, Con anzuelos de pesca a vuestro remanente;°
Porque es aún visión para el tiempo señalado: ella hablará al fin y no será frustrada. Aunque tarde, aguárdala, porque sin duda vendrá, y no se retrasará.
Esta es la ciudad alegre que vivía despreocupada; que decía en su corazón: Nadie más que yo. ¡Cómo se ha tornado en horror, en madriguera de fieras! Cualquiera que pase junto a ella silbará meneando la mano.
Porque vosotros sabéis exactamente que el día del Señor viene así como un ladrón por la noche.°
Partieron pues los cinco hombres y llegaron a Lais, y vieron que la población que había en ella vivía con seguridad, a la manera de los sidonios, tranquilos y confiados, porque no había en aquella tierra nadie que los perturbara en cosa alguna, ni quien se enseñoreara de ellos, y estaban lejos de los sidonios y no tenían trato con nadie.