hijo de Abisúa, hijo de Pinjás, hijo de Eleazar, hijo del sumo sacerdote Aarón,
Levítico 10:16 - Biblia Serafín de Ausejo 1975 Moisés preguntó insistentemente por el macho cabrío del sacrificio por el pecado, pero ya había sido quemado. Entonces se irritó contra Eleazar e Itamar, los hijos que le quedaban a Aarón, y les dijo: Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y Moisés preguntó por el macho cabrío de la expiación, y se halló que había sido quemado; y se enojó contra Eleazar e Itamar, los hijos que habían quedado de Aarón, diciendo: Biblia Nueva Traducción Viviente Luego Moisés les preguntó qué había sucedido con el chivo de la ofrenda por el pecado. Cuando descubrió que había sido quemado, se enojó mucho con Eleazar e Itamar, los hijos que le quedaban a Aarón. Biblia Católica (Latinoamericana) Entretanto Moisés quiso cerciorarse acerca del macho cabrío del sacrificio por el pecado; pero vio que había sido quemado. Se enojó con Eleazar e Itamar, los hijos que le habían quedado a Aarón, La Biblia Textual 3a Edicion Moisés buscó con empeño el macho cabrío de la ofrenda por el pecado, y he aquí ya había sido quemado. Entonces estalló en ira contra Eleazar e Itamar (los hijos que le quedaban a Aarón), diciendo: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Moisés demandó el macho cabrío de la ofrenda por el pecado, y se halló que había sido quemado; y se enojó contra Eleazar e Itamar, los hijos de Aarón que habían quedado, diciendo: Biblia Traducción en Lenguaje Actual Poco después Moisés preguntó por el chivo que se ofrece para el perdón de los pecados. Cuando supo que ya había sido quemado sobre el altar, se enojó con Itamar y Eleazar, y les dijo: |
hijo de Abisúa, hijo de Pinjás, hijo de Eleazar, hijo del sumo sacerdote Aarón,
Presentó a continuación la ofrenda del pueblo: tomó el macho cabrío destinado al sacrificio por el pecado del pueblo, lo inmoló e hizo un sacrificio expiatorio como el anterior.
Y dirás a los israelitas: 'Tomad un macho cabrío para el sacrificio por el pecado; un becerro y un cordero de un año, sin defecto, para el holocausto;
Moisés era un hombre muy humilde, más que cualquier otro hombre de sobre la faz de la tierra.
Pero yo os digo: todo el que se enoje contra su hermano comparecerá ante el tribunal; y el que diga a su hermano estúpido comparecerá ante el sanedrín; y el que le diga renegado comparecerá para la gehenna del fuego.
Cuando Jesús lo vio, lo llevó muy a mal y les dijo: 'Dejad que los niños vengan a mí, no se lo impidáis; pues el reino de Dios es de los que son como ellos.
Y mirándolos en torno con ira, apenado por la dureza de su corazón, dice al hombre: 'Extiende la mano'. Él la extendió, y la mano se le quedó sana.
Si os indignáis, no lleguéis a pecar: no se ponga el sol sobre vuestra ira,