Dijo, pues, José a sus hermanos: 'Yo soy José. ¿Vive todavía mi padre?'. Sus hermanos no pudieron responderle, porque quedaron aterrados ante él.
Éxodo 4:18 - Biblia Serafín de Ausejo 1975 Volvió Moisés a casa de su suegro Yetró y le dijo: 'Permíteme que vuelva a mis hermanos de Egipto, para ver si todavía viven'. Respondió Yetró a Moisés: 'Vete en paz'. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Así se fue Moisés, y volviendo a su suegro Jetro, le dijo: Iré ahora, y volveré a mis hermanos que están en Egipto, para ver si aún viven. Y Jetro dijo a Moisés: Ve en paz. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego Moisés volvió a la casa de Jetro, su suegro, y le dijo: —Por favor, permíteme volver a Egipto para visitar a mis parientes. Ni siquiera sé si todavía viven. —Ve en paz —le respondió Jetro. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé dijo a Moisés, en el país de Madián: 'Regresa a Egipto, pues ya murieron los que querían tu muerte. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces fue Moisés y volvió a su suegro Jetro, y le dijo: Me marcharé ahora y volveré con mis hermanos que están en Egipto, y veré si aún viven. Y Jetro dijo a Moisés: Ve en paz. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así se fue Moisés, y volviendo a su suegro Jetro, le dijo: Iré ahora, y volveré a mis hermanos que están en Egipto, para ver si aún viven. Y Jetro dijo a Moisés: Ve en paz. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Moisés volvió entonces a donde estaba su suegro Jetró, y le dijo: —Déjame regresar a Egipto. Quiero ver si todavía siguen con vida los israelitas. Jetró le dijo: —Vete tranquilo. Espero que te vaya bien. |
Dijo, pues, José a sus hermanos: 'Yo soy José. ¿Vive todavía mi padre?'. Sus hermanos no pudieron responderle, porque quedaron aterrados ante él.
Eliseo le envió un mensajero a decirle: 'Ve y lávate siete veces en el Jordán; volverá a ti tu carne y quedarás limpio'.
Respondió Eliseo: 'Vete en paz'. Y se marchó, haciendo un buen trecho de camino.
Moisés accedió a morar con aquel hombre, el cual le dio por mujer a su hija Séfora.
Apacentaba Moisés el rebaño de Yetró, su suegro, sacerdote de Madián. Trashumando con el rebaño por el desierto, llegó hasta la montaña de Dios, Horeb.
Algunos días más tarde, dijo Pablo a Bernabé: 'Vamos a visitar de nuevo a los hermanos por todas las ciudades en las que anunciamos la palabra del Señor, para ver cómo están'.
Comunicó el carcelero este recado a Pablo: 'Los pectores han enviado a decir que seáis puestos en libertad; salid, pues, y marchaos en paz'.
Los que están sometidos al yugo de la esclavitud, tengan a sus amos por dignos de todo respeto, para que no se desacredite el nombre de Dios y la doctrina.
Respondióles el sacerdote: 'Id en paz, pues el viaje que hacéis está bajo la mirada de Yahveh'.
Le dijo entonces Elí: 'Vete en paz, y que el Dios de Israel te conceda la petición que le has hecho'.