A partir de ese momento, Esaú guardó un profundo rencor hacia su hermano por causa de la bendición que le había dado su padre, y pensaba: «Ya falta poco para que hagamos duelo por mi padre; después de eso, mataré a mi hermano Jacob».
Proverbios 16:7 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Cuando el Señor aprueba la conducta de un hombre, hasta con sus enemigos lo reconcilia. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, Aun a sus enemigos hace estar en paz con él. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando la vida de alguien agrada al Señor, hasta sus enemigos están en paz con él. Biblia Católica (Latinoamericana) Si Yavé aprecia tu conducta, hará que tus mismos enemigos se reconcilien contigo. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando los caminos del hombre agradan a YHVH, Él hace que sus enemigos estén en paz con él. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si Yahveh se complace en la conducta de un hombre, lo reconciliará hasta con sus mismos enemigos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Cuando los caminos del hombre son agradables a Jehová, aun a sus enemigos hace estar en paz con él. |
A partir de ese momento, Esaú guardó un profundo rencor hacia su hermano por causa de la bendición que le había dado su padre, y pensaba: «Ya falta poco para que hagamos duelo por mi padre; después de eso, mataré a mi hermano Jacob».
Entonces el hombre le dijo: ―Ya no te llamarás Jacob, sino Israel, porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido.
Pero Esaú corrió a su encuentro y, echándole los brazos al cuello, lo abrazó y lo besó. Entonces los dos se pusieron a llorar.
Todos los reinos de las naciones vecinas de Judá sintieron un miedo profundo hacia el Señor y no se atrevieron a declararle la guerra a Josafat.
Por lo tanto, el reinado de Josafat disfrutó de tranquilidad, y Dios le dio paz por todas partes.
Y se les entregaron los decretos del rey a los sátrapas del reino y a los gobernadores de la provincia al oeste del río Éufrates, los cuales prestaron todo su apoyo al pueblo y al templo de Dios.
Esa ofrenda agradará más al Señor que la de un toro o un novillo con sus cuernos y pezuñas.
Pero yo haré que este pueblo se gane la simpatía de los egipcios, de modo que cuando vosotros salgáis de Egipto no os vayáis con las manos vacías.
El Señor dijo: «De veras te libraré para bien; haré que el enemigo te suplique en tiempos de calamidad y de angustia.
«Vigílalo bien, sin hacerle ningún daño, y atiende a todas sus necesidades».
Tendré compasión de vosotros, y de esa manera él también tendrá compasión de vosotros y os permitirá volver a vuestra tierra”.
Y aunque Dios había hecho que Daniel se ganara el afecto y la simpatía del jefe de oficiales,
¿Qué diremos frente a esto? Si Dios está de nuestra parte, ¿quién puede estar en contra nuestra?
Ya he recibido todo lo que necesito y aún más; tengo hasta de sobra ahora que he recibido de Epafrodito lo que me enviasteis. Es una ofrenda fragante, un sacrificio que Dios acepta con agrado.
para que viváis de manera digna del Señor, agradándole en todo. Esto implica dar fruto en toda buena obra, crecer en el conocimiento de Dios
Que él los capacite en todo lo bueno para hacer su voluntad. Y que, por medio de Jesucristo, Dios cumpla en nosotros lo que le agrada. A él sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Y a vosotros, ¿quién os va a hacer daño si os esforzáis por hacer el bien?
y recibimos todo lo que le pedimos porque obedecemos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada.