La bendición de los justos enaltece a la ciudad, pero la boca de los malvados la destruye.
Proverbios 10:32 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Los labios del justo destilan bondad; de la boca del malvado brota perversidad. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Los labios del justo saben hablar lo que agrada; Mas la boca de los impíos habla perversidades. Biblia Nueva Traducción Viviente Los labios del justo hablan palabras provechosas, pero la boca del malvado habla perversidad. Biblia Católica (Latinoamericana) La bondad se hospeda en los labios del justo, y la corrupción, en la boca de los malvados. La Biblia Textual 3a Edicion Los labios del justo destilan benevolencia, Pero la boca de los impíos, maldad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los labios del justo destilan bondad; la boca de los malvados, perversidad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Los labios del justo saben lo que es aceptable; mas la boca de los impíos habla perversidades. |
La bendición de los justos enaltece a la ciudad, pero la boca de los malvados la destruye.
El charlatán hiere con la lengua como con una espada, pero la lengua del sabio brinda alivio.
Las palabras del malvado son insidias de muerte, pero la boca de los justos los pone a salvo.
La lengua de los sabios destila conocimiento; la boca de los necios escupe necedades.
El corazón del justo medita sus respuestas, pero la boca del malvado rebosa de maldad.
La sabiduría te librará del camino de los malvados, de los que profieren palabras perversas,
Aleja de tu boca la perversidad; aparta de tus labios las palabras corruptas.
Las palabras del sabio son placenteras, pero los labios del necio son su ruina;
Procuró también hallar las palabras más adecuadas y escribirlas con honradez y veracidad.
Por lo tanto, oh rey, yo te ruego que aceptes el consejo que te voy a dar: Renuncia a tus pecados y actúa con justicia; renuncia a tu maldad y sé bondadoso con los oprimidos. Tal vez entonces tu prosperidad vuelva a ser la de antes».
y con un mensaje sano e intachable. Así se avergonzará cualquiera que se oponga, pues no podrá decir nada malo de nosotros.