y le preguntó: ―Agar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y a dónde vas? ―Estoy huyendo de mi dueña Saray —respondió ella.
Números 22:9 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Dios se le apareció a Balán, y le dijo: ―¿Quiénes son estos hombres que se alojan contigo? Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y vino Dios a Balaam, y le dijo: ¿Qué varones son estos que están contigo? Biblia Nueva Traducción Viviente Esa noche Dios vino a Balaam y le preguntó: —¿Quiénes son estos hombres que te visitan? Biblia Católica (Latinoamericana) Dios visitó a Balaam y le dijo: '¿Quiénes son esos hombres que están en tu casa?' La Biblia Textual 3a Edicion Y vino ’Elohim a Balaam, y le dijo: ¿Qué varones son estos que están contigo? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dios vino a Balaán y le dijo: '¿Quiénes son esos hombres que están contigo?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vino Dios a Balaam, y le dijo: ¿Qué varones son estos que están contigo? |
y le preguntó: ―Agar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y a dónde vas? ―Estoy huyendo de mi dueña Saray —respondió ella.
Pero aquella noche Dios se le apareció a Abimélec en sueños y le dijo: ―Puedes darte por muerto a causa de la mujer que has tomado, porque ella es casada.
Pero esa misma noche Dios se le apareció en un sueño a Labán el arameo y le dijo: «¡Cuidado con amenazar a Jacob!»
El Señor le preguntó a Caín: ―¿Dónde está tu hermano Abel? ―No lo sé —respondió—. ¿Acaso soy yo el que debe cuidar a mi hermano?
José le explicó al faraón: ―En realidad, los dos sueños del faraón son uno solo. Dios le ha anunciado lo que él va a hacer.
―¿Qué tienes en la mano? —preguntó el Señor. ―Una vara —respondió Moisés.
Tal es el sentido del sueño donde la roca se desprendía de una montaña; roca que, sin la intervención de nadie, hizo añicos al hierro, al bronce, al barro, a la plata y al oro. El gran Dios te ha mostrado, rey, lo que tendrá lugar en el futuro. El sueño es verdadero, y esta interpretación, digna de confianza».
Balán le respondió: ―Son los mensajeros que envió Balac hijo de Zipor, que es el rey de Moab. Los envió a decirme:
Aquella noche Dios se le apareció a Balán y le dijo: «Ya que estos hombres han venido a llamarte, ve con ellos, pero solo harás lo que yo te ordene».
Balán los invitó a pasar allí la noche, prometiendo comunicarles después lo que el Señor le dijera. Y los gobernantes se alojaron con él.
Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas que harán grandes señales y milagros para engañar, a ser posible, aun a los elegidos.
Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios e hicimos muchos milagros?”
Pero esto no lo dijo por su propia cuenta, sino que, como era sumo sacerdote ese año, profetizó que Jesús moriría por la nación judía,