Además, nos impusimos la obligación de contribuir cada año con cuatro gramos de plata para los gastos del templo de nuestro Dios:
Nehemías 5:10 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Mis hermanos y mis criados, y hasta yo mismo, les hemos prestado dinero y trigo. Pero ahora, ¡quitémosles esa carga de encima! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 También yo y mis hermanos y mis criados les hemos prestado dinero y grano; quitémosles ahora este gravamen. Biblia Nueva Traducción Viviente Yo mismo, al igual que mis hermanos y mis trabajadores, he estado prestando dinero y grano al pueblo, pero ahora dejemos de cobrarles intereses. Biblia Católica (Latinoamericana) Yo mismo, mis hermanos y mis hombres les hemos prestado dinero y trigo, ¡pues bien condonémosles su deuda! La Biblia Textual 3a Edicion También yo y mis hermanos y mis criados les hemos prestado dinero y grano. ¡Renunciemos ahora a esta usura! Biblia Serafín de Ausejo 1975 También yo, mis hermanos y mis criados les hemos prestado dinero y trigo. ¡Vamos a condonarles estas deudas! Biblia Reina Valera Gómez (2023) También yo y mis hermanos y mis criados, les hemos prestado dinero y grano; absolvámosles ahora de este gravamen. |
Además, nos impusimos la obligación de contribuir cada año con cuatro gramos de plata para los gastos del templo de nuestro Dios:
Yo os ruego que les devolváis sus campos, viñedos, olivares y casas, y también el uno por ciento de la plata, del trigo, del vino y del aceite que vosotros les exigís.
Y, después de reflexionar, reprendí a los nobles y gobernantes: ―¡Es inconcebible que vuestros propios hermanos os exijan el pago de intereses! Convoqué además una gran asamblea contra ellos,
Yo añadí: ―Lo que estáis haciendo no está bien. ¿No deberíais mostrar la debida reverencia a nuestro Dios y evitar así el reproche de los paganos, nuestros enemigos?
que presta dinero sin ánimo de lucro, y no acepta sobornos que afecten al inocente. El que así actúa no caerá jamás.
»El ayuno que he escogido, ¿no es más bien romper las cadenas de injusticia y desatar las correas del yugo, poner en libertad a los oprimidos y romper toda atadura?
que, además, preste dinero con usura y exija intereses. ¿Tal hijo merece vivir? ¡Claro que no! Por haber incurrido en estos actos asquerosos, será condenado a muerte, y de su muerte solo él será responsable.
No oprime a nadie, ni roba, sino que devuelve la prenda al deudor, da de comer al hambriento y viste al desnudo.
No presta dinero con usura ni exige intereses. Se abstiene de hacer el mal y juzga imparcialmente entre los rivales.
¡Ay de los que solo piensan en el mal, y aun acostados hacen planes malvados! En cuanto amanece, los llevan a cabo porque tienen el poder en sus manos.
Por tanto, como sabemos lo que es temer al Señor, tratamos de persuadir a todos, aunque para Dios es evidente lo que somos, y espero que también lo sea para vuestra conciencia.
Así que somos embajadores de Cristo, como si Dios os exhortara a vosotros por medio de nosotros: «En nombre de Cristo os rogamos que os reconciliéis con Dios».
Nosotros, colaboradores de Dios, os rogamos que no recibáis su gracia en vano.
Lo harás de la siguiente manera: Cada acreedor le perdonará a su prójimo el préstamo que le haya hecho. Ya no le exigirá a su prójimo o hermano que le pague la deuda, porque se habrá proclamado el año del perdón de las deudas en honor del Señor.