Su fama se extendió por toda Siria, y le llevaban todos los que padecían de diversas enfermedades, los que sufrían de dolores graves, los endemoniados, los epilépticos y los paralíticos, y él los sanaba.
Mateo 8:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 ―Señor, mi siervo está postrado en casa con parálisis y sufre terriblemente. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado. Biblia Nueva Traducción Viviente —Señor, mi joven siervo está en cama, paralizado y con terribles dolores. Biblia Católica (Latinoamericana) Señor, mi muchacho está en cama, totalmente paralizado, y sufre terriblemente. La Biblia Textual 3a Edicion Señor, mi siervo yace en la casa paralítico, gravemente atormentado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Señor, mi criado está en casa paralítico, con terribles dolores'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y diciendo: Señor, mi siervo está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado. |
Su fama se extendió por toda Siria, y le llevaban todos los que padecían de diversas enfermedades, los que sufrían de dolores graves, los endemoniados, los epilépticos y los paralíticos, y él los sanaba.
Unos hombres le llevaron un paralítico, acostado en una camilla. Al ver Jesús la fe de ellos, le dijo al paralítico: ―¡Ánimo, hijo; tus pecados quedan perdonados!
Después de que se fuera el ángel que le había hablado, Cornelio llamó a dos de sus siervos y a un soldado devoto de los que le servían regularmente.
De muchos endemoniados los espíritus malignos salían dando alaridos, y un gran número de paralíticos y cojos quedaban sanos.
Allí encontró a un paralítico llamado Eneas, que llevaba ocho años en cama.
En esta nueva naturaleza no hay griego ni judío, circunciso ni incircunciso, culto ni inculto, esclavo ni libre, sino que Cristo es todo y está en todos.
Amos, proporcionad a vuestros esclavos lo que es justo y equitativo, conscientes de que vosotros también tenéis un Amo en el cielo.
Los que tienen amos creyentes no deben faltarles al respeto por ser hermanos. Al contrario, deben servirles todavía mejor, porque los que se benefician de sus servicios son creyentes y hermanos queridos. Esto es lo que debes enseñar y recomendar.
ya no como a esclavo, sino como algo mejor: como a un hermano querido, muy especial para mí, pero mucho más para ti, como persona y como hermano en el Señor.