Jacob llamó a ese lugar Penuel, porque dijo: «He visto a Dios cara a cara, y todavía sigo con vida».
Mateo 5:8 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Dichosos los de corazón limpio, porque ellos verán a Dios. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios bendice a los que tienen corazón puro, porque ellos verán a Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Felices los de corazón limpio, porque verán a Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Bienaventurados los de limpio corazón,° porque ellos verán a Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Bienaventurados los de limpio corazón; porque ellos verán a Dios. |
Jacob llamó a ese lugar Penuel, porque dijo: «He visto a Dios cara a cara, y todavía sigo con vida».
Solo el de conducta intachable, que practica la justicia y de corazón dice la verdad;
Solo el de manos limpias y corazón puro, el que no adora ídolos vanos ni jura por dioses falsos.
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva la firmeza de mi espíritu.
Yo sé que tú amas la verdad en lo íntimo; en lo secreto me has enseñado sabiduría.
El que ama la pureza de corazón y tiene gracia al hablar tendrá por amigo al rey.
Sin hacer distinción alguna entre nosotros y ellos, purificó sus corazones por la fe.
Ahora vemos de manera indirecta y velada, como en un espejo; pero entonces veremos cara a cara. Ahora conozco de manera imperfecta, pero entonces conoceré tal y como soy conocido.
Como tenemos estas promesas, queridos hermanos, purifiquémonos de todo lo que contamina el cuerpo y el espíritu, para completar en el temor de Dios la obra de nuestra santificación.
Para los puros todo es puro, pero para los corruptos e incrédulos no hay nada puro. Al contrario, tienen corrompidas la mente y la conciencia.
Acerquémonos, pues, a Dios con corazón sincero y con la plena seguridad que da la fe, interiormente purificados de una conciencia culpable y exteriormente lavados con agua pura.
Si esto es así, ¡cuánto más la sangre de Cristo, quien por medio del Espíritu eterno se ofreció sin mancha a Dios, purificará nuestra conciencia de las obras que conducen a la muerte, a fin de que sirvamos al Dios viviente!
En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura, y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera.
Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. ¡Pecadores, limpiaos las manos! ¡Vosotros los inconstantes, purificad vuestro corazón!
Ahora que os habéis purificado obedeciendo a la verdad y tenéis un amor sincero por los hermanos, amaos de todo corazón los unos a los otros.