Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Mateo 24:29 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

»Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, »“se oscurecerá el sol y no brillará más la luna; las estrellas caerán del cielo y los cuerpos celestes serán sacudidos”.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

»Inmediatamente después de la angustia de esos días, “El sol se oscurecerá, la luna no dará luz, las estrellas caerán del cielo, y los poderes de los cielos serán sacudidos” .

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Después de esos días de angustia, el sol se oscurecerá, la luna perderá su brillo, caerán las estrellas del cielo y se bambolearán los mecanismos del universo.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol será oscurecido y la luna no dará su resplandor; las estrellas caerán del cielo° y las potencias de los cielos serán conmovidas:

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se obscurecerá y la luna no dará su brillo, las estrellas caerán del cielo y el mundo de los astros se desquiciará.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Mateo 24:29
21 Referans Kwoze  

antes que dejen de brillar el sol y la luz, la luna y las estrellas, y vuelvan las nubes después de la lluvia.


Las estrellas y las constelaciones del cielo dejarán de irradiar su luz; se oscurecerá el sol al salir y no brillará más la luna.


La luna se sonrojará y el sol se avergonzará, porque sobre el monte Sión, sobre Jerusalén, reinará el Señor Todopoderoso, glorioso entre sus ancianos.


Se desintegrarán todos los astros del cielo y se enrollará el cielo como un pergamino; toda la multitud de astros perderá su brillo, como lo pierde la hoja marchita de la vid, o los higos secos de la higuera.


Ante este ejército tiembla la tierra y se estremece el cielo, el sol y la luna se oscurecen y las estrellas dejan de brillar.


Se oscurecerán el sol y la luna; dejarán de brillar las estrellas.


¿No será el día del Señor de oscuridad y no de luz? ¡Será por cierto sombrío y sin resplandor!


»En aquel día —afirma el Señor omnipotente—, »haré que el sol se ponga al mediodía, y que en pleno día la tierra se oscurezca.


Porque habrá una gran tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá jamás.


Todo esto será apenas el comienzo de los dolores.


Pero el día del Señor vendrá como un ladrón. En aquel día los cielos desaparecerán con un estruendo espantoso, los elementos serán destruidos por el fuego, y la tierra, con todo lo que hay en ella, será quemada.


Tocó el cuarto ángel su trompeta, y fue asolada la tercera parte del sol, de la luna y de las estrellas, de modo que se oscureció la tercera parte de ellos. Así quedó sin luz la tercera parte del día y la tercera parte de la noche.