Abraham fue rápidamente a la tienda donde estaba Sara y le dijo: ―¡Date prisa! Toma unos veinte kilos de harina fina, amásalos y haz unos panes.
Mateo 13:33 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Les contó otra parábola más: «El reino de los cielos es como la levadura que una mujer tomó y mezcló en una gran cantidad de harina, hasta que fermentó toda la masa». Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús también usó la siguiente ilustración: «El reino del cielo es como la levadura que utilizó una mujer para hacer pan. Aunque puso solo una pequeña porción de levadura en tres medidas de harina, la levadura impregnó toda la masa». Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús les contó otra parábola: 'Aquí tienen otra figura del Reino de los Cielos: la levadura que toma una mujer y la introduce en tres medidas de harina. Al final, toda la masa fermenta. La Biblia Textual 3a Edicion Otra parábola les habló: El reino de los cielos es semejante a la levadura° que una mujer tomó y la escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Otra parábola les dijo: 'El reino de los cielos se parece a un poco de levadura que una mujer tomó y mezcló con tres medidas de harina hasta que fermentó toda la masa'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Otra parábola les dijo: El reino del cielo es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado. |
Abraham fue rápidamente a la tienda donde estaba Sara y le dijo: ―¡Date prisa! Toma unos veinte kilos de harina fina, amásalos y haz unos panes.
Así que Amnón se acostó y fingió estar enfermo. Y, cuando el rey fue a verlo, Amnón le dijo: ―Por favor, que venga mi hermana Tamar a prepararme aquí mismo dos tortas, y que me las sirva.
la gente recta se aferra a su camino y los de manos limpias aumentan su fuerza.
La senda de los justos se asemeja a los primeros albores de la aurora: su esplendor va en aumento hasta que el día alcanza su plenitud.
Conozcamos al Señor; vayamos tras su conocimiento. Tan cierto como que sale el sol, él habrá de manifestarse; vendrá a nosotros como la lluvia de invierno, como la lluvia de primavera que riega la tierra.
Jesús les contó otra parábola: «El reino de los cielos es como un hombre que sembró buena semilla en su campo.
Si el Señor no hubiera acortado esos días, nadie sobreviviría. Pero, por causa de los que él ha elegido, los ha acortado.
Es como la levadura que una mujer tomó y mezcló con una gran cantidad de harina, hasta que fermentó toda la masa.
Toda rama que en mí no da fruto, la corta; pero toda rama que da fruto la poda para que dé más fruto todavía.
Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en vosotros la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús.
Esto es lo que pido en oración: que vuestro amor abunde cada vez más en conocimiento y en buen juicio,
Más bien, creced en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. ¡A él sea la gloria ahora y para siempre! Amén.
Gedeón se fue a preparar un cabrito; además, con una medida de harina hizo panes sin levadura. Luego puso la carne en una canasta y el caldo en una olla, y los llevó y se los ofreció al ángel bajo la encina.
Cuando dejó de amamantarlo, salió con el niño, a pesar de ser tan pequeño, y lo llevó a la casa del Señor en Siló. También llevó un becerro de tres años, una medida de harina y un odre de vino.