Dicho esto, Satanás se retiró de la presencia del Señor para afligir a Job con dolorosas llagas desde la planta del pie hasta la coronilla.
Lucas 13:11 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 y estaba allí una mujer que por causa de un demonio llevaba dieciocho años enferma. Andaba encorvada y de ningún modo podía enderezarse. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 y había allí una mujer que desde hacía dieciocho años tenía espíritu de enfermedad, y andaba encorvada, y en ninguna manera se podía enderezar. Biblia Nueva Traducción Viviente vio a una mujer que estaba lisiada a causa de un espíritu maligno. Había estado encorvada durante dieciocho años y no podía ponerse derecha. Biblia Católica (Latinoamericana) Había allí una mujer que desde hacía dieciocho años estaba poseída por un espíritu que la tenía enferma, y estaba tan encorvada que no podía enderezarse de ninguna manera. La Biblia Textual 3a Edicion y he aquí una mujer que tenía° un espíritu de enfermedad por dieciocho años, y estaba encorvada y no podía enderezarse de ninguna manera. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y precisamente había una mujer que desde hacía dieciocho años tenía una enfermedad por causa de un espíritu, y estaba toda encorvada, sin poder enderezarse en manera alguna. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, había una mujer que tenía un espíritu de enfermedad hacía dieciocho años, y andaba encorvada, y en ninguna manera se podía enderezar. |
Dicho esto, Satanás se retiró de la presencia del Señor para afligir a Job con dolorosas llagas desde la planta del pie hasta la coronilla.
El Señor da vista a los ciegos, el Señor sostiene a los cansados, el Señor ama a los justos.
¿Por qué voy a inquietarme? ¿Por qué me voy a angustiar? En Dios pondré mi esperanza y todavía lo alabaré. ¡Él es mi Salvador y mi Dios!
Ten compasión de mí, Señor, porque desfallezco; sáname, Señor, que un frío de muerte recorre mis huesos.
Jesús recorría toda Galilea, enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas nuevas del reino, y sanando toda enfermedad y dolencia entre la gente.
―¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto? —le preguntó Jesús al padre. ―Desde que era niño —contestó—.
Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: ―Mujer, quedas libre de tu enfermedad.
Sin embargo, a esta mujer, que es hija de Abraham, y a quien Satanás tenía atada durante dieciocho largos años, ¿no se le debía quitar esta cadena en sábado?
Cuando comiencen a suceder estas cosas, cobrad ánimo y levantad la cabeza, porque se acerca vuestra redención».
y también algunas mujeres que habían sido sanadas de espíritus malignos y de enfermedades: María, a la que llamaban Magdalena, y de la que habían salido siete demonios;
Al desembarcar Jesús, un endemoniado que venía del pueblo le salió al encuentro. Hacía mucho tiempo que este hombre no se vestía; tampoco vivía en una casa, sino en los sepulcros.
Había entre la gente una mujer que hacía doce años que padecía de hemorragias, sin que nadie pudiera sanarla.
Junto a la puerta llamada Hermosa había un hombre lisiado de nacimiento, al que todos los días dejaban allí para que pidiera limosna a los que entraban en el templo.
pues el hombre que había sido milagrosamente sanado tenía más de cuarenta años.