Anda, ponte en marcha, que yo te ayudaré a hablar y te diré lo que debas decir.
Lucas 12:11 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 »Cuando os hagan comparecer ante las sinagogas, los gobernantes y las autoridades, no os preocupéis de cómo vais a defenderos o qué vais a decir, Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis por cómo o qué habréis de responder, o qué habréis de decir; Biblia Nueva Traducción Viviente »Cuando sean sometidos a juicio en las sinagogas y delante de gobernantes y autoridades, no se preocupen por cómo defenderse o qué decir, Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando los lleven ante las sinagogas, los jueces y las autoridades, no se preocupen de cómo se van a defender o qué van a decir;' La Biblia Textual 3a Edicion Y cuando os conduzcan a las sinagogas, y a los magistrados y a las autoridades, no os preocupéis de cómo o qué responderéis,° o qué diréis;° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando los poderes y las autoridades os hagan comparecer ante las sinagogas no os preocupéis de cómo o con qué os defenderéis o qué habéis de decir. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando os trajeren a las sinagogas, y ante los magistrados y potestades, no os preocupéis de cómo o qué habéis de responder, o qué habéis de decir; |
Anda, ponte en marcha, que yo te ayudaré a hablar y te diré lo que debas decir.
Por eso os voy a enviar profetas, sabios y maestros. A algunos de ellos mataréis y crucificaréis; a otros azotaréis en sus sinagogas y perseguiréis de pueblo en pueblo.
»Por eso os digo: No os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis o beberéis; ni por vuestro cuerpo, cómo os vestiréis. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa?
¿Quién de vosotros, por mucho que se preocupe, puede añadir una sola hora al curso de su vida?
»¿Y por qué os preocupáis por el vestido? Observad cómo crecen los lirios del campo. No trabajan ni hilan;
Así que no os preocupéis diciendo: “¿Qué comeremos?” o “¿Qué beberemos?” o “¿Con qué nos vestiremos?”
Por lo tanto, no os angustiéis por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas.
Luego dijo Jesús a sus discípulos: ―Por eso os digo: No os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por vuestro cuerpo, con qué os vestiréis.