Lucas 11:46 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Contestó Jesús: ―¡Ay de vosotros también, expertos en la ley! Abrumáis a los demás con cargas que apenas se pueden soportar, pero vosotros mismos no levantáis ni un dedo para ayudarlos. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y él dijo: ¡Ay de vosotros también, intérpretes de la ley! porque cargáis a los hombres con cargas que no pueden llevar, pero vosotros ni aun con un dedo las tocáis. Biblia Nueva Traducción Viviente —Sí —dijo Jesús—, ¡qué aflicción les espera también a ustedes, expertos en la ley religiosa! Pues aplastan a la gente bajo el peso de exigencias religiosas insoportables y jamás mueven un dedo para aligerar la carga. Biblia Católica (Latinoamericana) El contestó: '¡Pobres de ustedes también, maestros de la Ley, porque imponen a los demás cargas insoportables, y ustedes ni siquiera mueven un dedo para ayudarles!' La Biblia Textual 3a Edicion Él respondió: ¡Ay también de vosotros, los doctos de la ley! Porque cargáis a los hombres con cargas difíciles de llevar, pero vosotros no tocáis las cargas con uno de vuestros dedos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero él contestó: '¡Ay también de vosotros, doctores de la ley, que echáis sobre los hombres cargas casi imposibles de soportar, pero vosotros no las tocáis ni siquiera con uno de vuestros dedos! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Él dijo: ¡Ay de vosotros también, doctores de la ley! que abrumáis a los hombres con cargas pesadas de llevar; mas vosotros ni aun con un dedo las tocáis. |
»El ayuno que he escogido, ¿no es más bien romper las cadenas de injusticia y desatar las correas del yugo, poner en libertad a los oprimidos y romper toda atadura?
Uno de los expertos en la ley le respondió: ―Maestro, al hablar así nos insultas también a nosotros.
»¡Ay de vosotros, expertos en la ley!, porque os habéis adueñado de la llave del conocimiento. Vosotros mismos no habéis entrado, y a los que querían entrar les habéis cerrado el paso».
Ni siquiera esos que están circuncidados obedecen la ley; lo que pasa es que os quieren obligar a circuncidaros para luego jactarse de la señal que llevaríais en el cuerpo.