―No temas —le dijo Elías—. Vuelve a casa y haz lo que pensabas hacer. Pero antes prepárame un panecillo con lo que tienes, y tráemelo; luego haz algo para ti y para tu hijo.
Jueces 7:5 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Gedeón hizo que los hombres bajaran al agua. Allí el Señor le dijo: «A los que laman el agua con la lengua, como los perros, sepáralos de los que se arrodillen a beber». Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces llevó el pueblo a las aguas; y Jehová dijo a Gedeón: Cualquiera que lamiere las aguas con su lengua como lame el perro, a aquel pondrás aparte; asimismo a cualquiera que se doblare sobre sus rodillas para beber. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando Gedeón bajó con sus guerreros hasta el agua, el Señor le dijo: «Divide a los hombres en dos grupos. En un grupo, pon a todos los que beban el agua en sus manos lamiéndola como hacen los perros. En el otro grupo, pon a todos los que se arrodillan para beber directamente del arroyo». Biblia Católica (Latinoamericana) Se dispuso pues que el pueblo bajara al agua, y Yavé dijo a Gedeón: 'A los que laman el agua como lo hace el perro los separarás de los que se arrodillen para beber'. La Biblia Textual 3a Edicion Hizo pues que el pueblo bajara a las aguas, y dijo YHVH a Gedeón: Todo el que lama las aguas con su lengua, como lame el perro, lo pondrás aparte; asimismo a todo el que se arrodille para beber. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Hizo, pues, Gedeón que la tropa bajara al agua; y dijo Yahveh a Gedeón: 'Los que laman el agua con la lengua, como los perros, ponlos aparte de los que doblen la rodilla para beber'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces llevó el pueblo a las aguas: y Jehová dijo a Gedeón: Cualquiera que lamiere las aguas con su lengua como lame el perro, aquél pondrás aparte; asimismo cualquiera que se doblare sobre sus rodillas para beber. |
―No temas —le dijo Elías—. Vuelve a casa y haz lo que pensabas hacer. Pero antes prepárame un panecillo con lo que tienes, y tráemelo; luego haz algo para ti y para tu hijo.
Beberá de un arroyo junto al camino, y por lo tanto cobrará nuevas fuerzas.
Pero el Señor le dijo a Gedeón: «Todavía hay demasiada gente. Hazlos bajar al agua, y allí los seleccionaré por ti. Si digo: “Este irá contigo”, ese irá; pero si digo: “Este no irá contigo”, ese no irá».
Trescientos hombres lamieron el agua llevándola de la mano a la boca. Todos los demás se arrodillaron para beber.