Bien le va al que presta con generosidad, y maneja sus negocios con justicia.
Jueces 6:27 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Gedeón llevó a diez de sus siervos e hizo lo que el Señor le había ordenado. Pero en lugar de hacerlo de día lo hizo de noche, pues tenía miedo de su familia y de los hombres de la ciudad. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces Gedeón tomó diez hombres de sus siervos, e hizo como Jehová le dijo. Mas temiendo hacerlo de día, por la familia de su padre y por los hombres de la ciudad, lo hizo de noche. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Gedeón llevó a diez de sus criados e hizo lo que el Señor le había ordenado; pero lo hizo de noche, porque les tenía miedo a los demás miembros de la casa de su padre y a la gente de la ciudad. Biblia Católica (Latinoamericana) Gedeón tomó a diez de sus sirvientes e hizo lo que Yavé le había ordenado. Pero no lo hizo de día porque temía a la familia de su padre y a los hombres de la ciudad; por eso lo hizo de noche. La Biblia Textual 3a Edicion Tomó pues Gedeón diez hombres de sus siervos, e hizo como le había dicho YHVH. Pero, por temor a la casa de su padre y a los hombres de la ciudad, no hizo eso de día, sino que lo hizo de noche. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tomó, pues, Gedeón diez hombres de entre sus siervos y ejecutó lo que Yahveh le había indicado; pero, por temor a su familia y a la gente de la ciudad, en vez de hacerlo de día, lo hizo de noche. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Gedeón tomó diez hombres de sus siervos, e hizo como Jehová le dijo. Mas temiendo hacerlo de día, por la familia de su padre y por los hombres de la ciudad, lo hizo de noche. |
Bien le va al que presta con generosidad, y maneja sus negocios con justicia.
Luego dijo Jesús a sus discípulos: ―Si alguien quiere ser mi discípulo, tiene que negarse a sí mismo, tomar su cruz y seguirme.
Este fue de noche a visitar a Jesús. ―Rabí —le dijo—, sabemos que eres un maestro que ha venido de parte de Dios, porque nadie podría hacer las señales que tú haces si Dios no estuviera con él.
revelarme a su Hijo para que yo lo predicara entre los gentiles, no consulté con nadie.
»Ahora, israelitas, escuchad los preceptos y las normas que os enseñé, para que los pongáis en práctica. Así viviréis y podréis entrar en la tierra que el Señor y Dios de vuestros antepasados os da en posesión.
Al contrario, hablamos como hombres a quienes Dios aprobó y les confió el evangelio: no tratamos de agradar a la gente, sino a Dios, que examina nuestro corazón.
Luego, sobre la cima de este lugar de refugio, construye un altar apropiado para el Señor tu Dios. Toma entonces la leña del poste de Aserá que cortaste, y ofrece el segundo toro como un holocausto».
Cuando los hombres de la ciudad se levantaron por la mañana, vieron que el altar de Baal estaba destruido, que el poste con la imagen de la diosa Aserá estaba cortado, y que el segundo toro había sido sacrificado sobre el altar recién construido.