Practicar la justicia y el derecho lo prefiere el Señor a los sacrificios.
Jueces 20:8 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Todo el pueblo se levantó como un solo hombre, y dijo: ―¡Ninguno de nosotros volverá a su tienda! ¡Nadie regresará a su casa! Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces todo el pueblo, como un solo hombre, se levantó, y dijeron: Ninguno de nosotros irá a su tienda, ni volverá ninguno de nosotros a su casa. Biblia Nueva Traducción Viviente Y todo el pueblo se puso de pie al mismo tiempo y proclamó a una voz: —¡Ninguno de nosotros volverá a su hogar! ¡No, ni una sola persona! Biblia Católica (Latinoamericana) Todo el pueblo se levantó como un solo hombre y dijo: '¡Que ninguno de nosotros se retire a su tienda, que nadie regrese a su casa!' La Biblia Textual 3a Edicion Entonces todo el pueblo se levantó como un solo hombre, y dijeron: Ninguno de nosotros irá a su tienda, ni volverá ninguno a su casa. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todo el pueblo como un solo hombre se levantó para decir: '¡Nadie volverá a su tienda ni se irá a su casa! Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces todo el pueblo, como un solo hombre, se levantó, y dijeron: Ninguno de nosotros irá a su tienda, ni ninguno de nosotros volverá a su casa. |
Practicar la justicia y el derecho lo prefiere el Señor a los sacrificios.
Y todo lo que esté en tu mano hacer, hazlo con todo empeño; porque en el sepulcro, adonde te diriges, no hay trabajo ni planes ni conocimiento ni sabiduría.
Todos los israelitas desde Dan hasta Berseba, incluso los de la tierra de Galaad, salieron como un solo hombre y se reunieron ante el Señor en Mizpa.
Así que todos los israelitas, como un solo hombre, unieron sus fuerzas para atacar la ciudad.
Ahora, todos vosotros israelitas, opinad y tomad una decisión aquí mismo.
Y esto es lo que le haremos ahora a Guibeá: Echaremos suertes para ver quiénes subirán contra ella.
Los israelitas habían jurado en Mizpa: «Ninguno de nosotros dará su hija en matrimonio a un benjaminita».
Luego preguntaron los israelitas: «¿Quién de entre todas las tribus de Israel no se presentó a la asamblea del Señor?» Porque habían pronunciado un juramento solemne contra cualquiera que no se presentara ante el Señor en Mizpa, diciendo: «Tendrá que morir».