Juan 3:26 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017 Aquellos fueron a ver a Juan y le dijeron: ―Rabí, fíjate, el que estaba contigo al otro lado del Jordán, y de quien tú diste testimonio, ahora está bautizando, y todos acuden a él. Plis vèsyonBiblia Reina Valera 1960 Y vinieron a Juan y le dijeron: Rabí, mira que el que estaba contigo al otro lado del Jordán, de quien tú diste testimonio, bautiza, y todos vienen a él. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces los discípulos de Juan fueron a decirle: —Rabí, el hombre que estaba contigo al otro lado del río Jordán, a quien identificaste como el Mesías, también está bautizando a la gente. Y todos van a él en lugar de venir a nosotros. Biblia Católica (Latinoamericana) Fueron donde Juan y le dijeron: 'Maestro, el que estaba contigo al otro lado del Jordán, y en cuyo favor tú hablaste, está ahora bautizando y todos se van a él. La Biblia Textual 3a Edicion Y se acercaron a Juan, y le dijeron: Rabbí, el que estaba contigo al otro lado del Jordán, de quien tú has dado testimonio, he aquí que bautiza y todos acuden a Él. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fueron, pues, a ver a Juan, y le dijeron: ' Rabbí, aquel que estaba contigo al otro lado del Jordán, de quien tú has dado testimonio, ahora se pone a bautizar, y todos acuden a él'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vinieron a Juan y le dijeron: Rabí, el que estaba contigo al otro lado del Jordán, de quien tú diste testimonio, he aquí Él bautiza, y todos vienen a Él. |
Vi además que tanto el afán como el éxito en la vida despiertan envidias. Y también esto es absurdo; ¡es correr tras el viento!
He jurado por mí mismo, con integridad he pronunciado una palabra irrevocable: Ante mí se doblará toda rodilla, y por mí jurará toda lengua.
»Pero no permitáis que a vosotros se os llame “Rabí”, porque tenéis un solo Maestro y todos vosotros sois hermanos.
Juan dio testimonio de él, y a voz en grito proclamó: «Este es aquel de quien yo decía: “El que viene después de mí es superior a mí, porque existía antes que yo”».
como testigo para dar testimonio de la luz, a fin de que por medio de él todos creyeran.
Si lo dejamos seguir así, todos van a creer en él, y vendrán los romanos y acabarán con nuestro lugar sagrado, e incluso con nuestra nación.
Por eso los fariseos comentaban entre sí: «Como podéis ver, así no vamos a lograr nada. ¡Mirad cómo lo sigue todo el mundo!»
Este fue de noche a visitar a Jesús. ―Rabí —le dijo—, sabemos que eres un maestro que ha venido de parte de Dios, porque nadie podría hacer las señales que tú haces si Dios no estuviera con él.
Jesús se enteró de que los fariseos sabían que él estaba haciendo y bautizando más discípulos que Juan
»Vosotros enviasteis una delegación a preguntar a Juan, y él dio un testimonio válido.