Bib sou entènèt

Piblisite


Tout bib la Ansyen Testaman Nouvo Testaman




Juan 10:38 - Biblia Nueva Versión Internacional 2017

Pero, si las hago, aunque no me creáis a mí, creed a mis obras, para que sepáis y entendáis que el Padre está en mí, y que yo estoy en el Padre.

Gade chapit la
Montre Interlinear Bible

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

Mas si las hago, aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en el Padre.

Gade chapit la

Biblia Nueva Traducción Viviente

pero si hago su trabajo, entonces crean en las obras milagrosas que he hecho aunque no me crean a mí. Entonces sabrán y entenderán que el Padre está en mí y yo estoy en el Padre.

Gade chapit la

Biblia Católica (Latinoamericana)

Pero si las hago, si no me creen a mí, crean a esas obras, para que sepan y reconozcan que el Padre está en mí y yo en el Padre.

Gade chapit la

La Biblia Textual 3a Edicion

pero si las hago, aunque no me creáis a mí, creed a las obras, para que conozcáis, y sigáis conociendo,° que el Padre está en mí y Yo en el Padre.

Gade chapit la

Biblia Serafín de Ausejo 1975

pero si las realizo, aunque a mí no me creáis, creed en esas obras, para que sepáis y conozcáis que el Padre está en mí y yo en el Padre'.

Gade chapit la

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pero si las hago, aunque a mí no me creáis, creed a las obras; para que conozcáis y creáis que el Padre está en mí, y yo en Él.

Gade chapit la
Lòt tradiksyon



Juan 10:38
12 Referans Kwoze  

―Ya os lo he dicho, y no lo creéis. Las obras que hago en nombre de mi Padre son las que me acreditan,


Cuando Jesús oyó esto, dijo: «Esta enfermedad no terminará en muerte, sino que es para la gloria de Dios, para que por ella el Hijo de Dios sea glorificado».


En aquel día os daréis cuenta de que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.


Ya no voy a estar por más tiempo en el mundo, pero ellos están todavía en el mundo, y yo vuelvo a ti. »Padre santo, protégelos con el poder de tu nombre, el nombre que me diste, para que sean uno, lo mismo que nosotros.


Este fue de noche a visitar a Jesús. ―Rabí —le dijo—, sabemos que eres un maestro que ha venido de parte de Dios, porque nadie podría hacer las señales que tú haces si Dios no estuviera con él.


»El testimonio con que yo cuento tiene más peso que el de Juan. Porque esa misma tarea que el Padre me ha encomendado que lleve a cabo, y que estoy haciendo, es la que testifica que el Padre me ha enviado.


»Pueblo de Israel, escuchad esto: Jesús de Nazaret fue un hombre acreditado por Dios ante vosotros con milagros, señales y prodigios, los cuales realizó Dios entre vosotros por medio de él, como bien sabéis.


El que obedece sus mandamientos permanece en Dios, y Dios en él. ¿Cómo sabemos que él permanece en nosotros? Por el Espíritu que nos dio.